En España es posible comprar niñas y explotarlas en la prostitución, según el libro El año que trafiqué con mujeres (editorial Temas de Hoy). Su autor, un periodista que simuló ser proxeneta y estuvo un año investigando las redes, mantuvo un encuentro con un narcotraficante mexicano en Madrid. Este le ofreció seis niñas del estado de Chiapas por 25.000 dólares cada una (algo más de 20.000 euros; 3,3 millones de pesetas). La condición fue que todas debían ser vírgenes. El narcotraficante le ofreció niñas de 14 años, pero también de 10, 11 y 12.

Antonio Salas, pseudónimo del autor, no acudió a la presentación de su libro, ayer en Madrid, porque está amenazado. El libro fue presentado, entre otros, por el comisario jefe de la Brigada de Redes de Inmigración, Carlos Botrán, quien corroboró que la prostitución en España afecta también a las niñas. La policía liberó el año pasado a 1.591 mujeres explotadas en burdeles. De ellas, 30 tenían entre 15 y 17 años.