Los peatones lloraban cuando veían el fuego en el edificio Mackintosh. La obra más importante del escocés Charles Rennie Mackintosh, más arte que arquitectura para la mayoría de sus compatriotas, sede de la reputada Glasgow School of Art y joya del siglo XX europeo sufrió ayer un incendio desencadenado por la explosión de un proyector en el sótano, según explicaron los alumnos, que se extendió después por el ala oeste y consumió parte de la biblioteca.

Los bomberos luchaban anoche denodadamente para controlar las llamas y salvar las obras de arte del interior.

"Es una tragedia para Escocia", se lamentaba, mientras seguía la noticia por televisión, el arquitecto británico David Mackay, socio del estudio de arquitectura MBM y presidente del jurado que escogió el proyecto para el edificio anexo de la escuela, hace unos años.

"Es un símbolo de Escocia. Fue el edificio más importante de su época, los comienzos del siglo XX, y es una de las maravillas del mundo", aseguró el reputado arquitecto.

PIEZA EMBLEMÁTICA Se trata de una emblemática pieza de art nouveau, objeto de estudio en todas las facultades. La escuela de arte que funciona en su interior es de las mejores de Europa.

"La destrucción de esta obra emblemática y del trabajo de los alumnos es algo horrible de ver", declaró el primer ministro, Alex Salmond.