Los 100 agentes de las Unidades de Intervención Policial (UIP) enviados por el Ministerio del Interior para el refuerzo del control fronterizo ya han llegado a Melilla.

Según han informado a Efe fuentes policiales, los agentes, que conforman dos grupos de las UIP formados por 50 antidisturbios cada uno, han arribado a la ciudad autónoma entre ayer y hoy, y ya se encuentran en disposición de incorporarse al servicio.

El refuerzo de estos agentes se suma al que ya está desplegado en Melilla desde hace semanas formado por nueve módulos de intervención rápida de los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil, que suman 180 agentes especialistas en el control de masas.

Estos agentes, según las fuentes, están entrenando nuevas formas de contención, diferentes a las que suelen emplear en sus funciones habituales, sobre todo, teniendo en cuenta que, en Melilla, desarrollan trabajos en altura, subidos en la valla o en escaleras.

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado están en "máxima alerta" en Melilla, ya que en cualquier momento puede producirse un intento de entrada masiva por parte de subsaharianos.

Durante esta madrugada, el refuerzo policial ha sido visible tanto en el lado español como en el marroquí, sobre todo en los puntos de la valla considerados como "sensibles", ya que no cuentan con las medidas antiintrusión, en concreto, con la malla antitrepa.

Tal y como anunció ayer el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, los esfuerzos se centran en acelerar la instalación de esta malla, que impide que los inmigrantes puedan introducir los dedos y así no puedan trepar por las verjas que componen el vallado.

El Gobierno ha trasladadó a última hora del miércoles a la Península a unos 150 inmigrantes para descongestionar el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), donde se acogían 2.400 inmigrantes cuando su capacidad óptima es de 480, después de que este miércoles hayan entrado en Melilla unos 500 subsaharianos.