Las autoridades marroquís denegaron la legalización a la primera asociación de homosexuales en Marruecos que la había solicitado, el colectivo Akaliyat (minorías). Akaliyat explicó que el wali (gobernador) de Rabat-Salé rechazó recibir el expediente de parte del presidente de la asociación, lo que equivale a la ilegalización, aunque no se exprese de forma explícita.

El wali explicó a los activistas que su solicitud no respetaba varios dispositivos legales, y dijo que la asociación no informó a las autoridades de la asamblea general constitutiva que habían celebrado el pasado 24 de diciembre. Akaliyat es la primera asociación de minoría sexual o religiosa en Marruecos que da el paso de pedir permiso para legalizarse, ya que el resto de asociaciones similares operan en la clandestinidad a pesar de la incipiente visibilidad que están adquiriendo en los últimos años.

El artículo 489 del Código Penal marroquí castiga la homosexualidad con penas de entre seis meses y tres años de cárcel, además de que se enfrenta a una gran reprobación social.

La propia ley que regula la creación de asociaciones estipula en su artículo 3 que «es nula cualquier asociación fundada en una causa o en un objetivo ilícito, contraria a las leyes o a la moral pública y que tenga como objetivo atentar contra la religión islámica, la integridad territorial o al régimen monárquico».