Más de un centenar de personas se han sumado hoy al acto en memoria de las víctimas del atentado de ETA contra el centro Hipercor de la avenida Meridiana de Barcelona, con motivo del 31 aniversario, y por primera vez tras la disolución definitiva de la banda terrorista.

Al acto, que ha organizado la Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas (ACVOT), ha acudido su presidente, José Vargas; el conseller de Interior de la Generalitat, Miquel Buch, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el fiscal superior de Catalunya, Francisco Bañeres, además de varios representantes políticos del PP, Cs, PSC, ERC en el parlamento catalán y el ayuntamiento de Barcelona.

En representación de las fuerzas de seguridad han asistido al homenaje comisarios de los Mossos d'Esquadra y mandos de la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Guardia Urbana de Barcelona.

"Barbarie y tristeza"

En un parlamento al comenzar el acto, el conseller de Interior ha expresado su "solidaridad" con las víctimas del atentado que sufrieron "barbarie y tristeza" y ha sostenido que "episodios" como el de Hipercor o los atentados de 2017 en Barcelona y Cambrils (Tarragona) "son ejemplo de que se debe continuar luchando por la seguridad de los ciudadanos".

Por su parte, la alcaldesa de Barcelona ha señalado que "han pasado 31 años del atentado pero Barcelona nunca olvidará el golpe ni las víctimas", quienes durante años "se han sentido muy solas y desatendidas por las administraciones" que "no hicieron lo que tenían que hacer". En este sentido, Colau ha explicado que el ayuntamiento "ha aprendido de los errores" y que las administraciones se esforzarán "para estar a la altura" de las necesidades de las víctimas.

El presidente de la ACVOT ha agradecido la presencia de los representantes políticos y de las Fuerzas de Seguridad del Estado, así como del gobierno vasco, varios sindicatos, Societat Civil Catalana y Empresaris de Catalunya, todos presentes también en el acto.En declaraciones a los periodistas, Vargas se ha mostrado "contento" por la afluencia de asistentes al homenaje pero ha apuntado que víctimas y familiares "no ven" el "acompañamiento del que hablan" los representantes políticos.

Tras los parlamentos, los participantes han guardado un minuto de silencio en recuerdo a las víctimas y han llevado a cabo una ofrenda de flores, que han depositado a los pies del monumento dedicado a todas las víctimas del terrorismo situado en la confluencia de la avenida Meridiana y la calle Río de Janeiro.

El primer homenaje desde el fin de ETA

Este homenaje ha sido el primero desde el fin definitivo de la banda terrorista, que anunció su disolución el pasado 3 de mayo en una carta, tras seis décadas de terrorismo y más de 850 personas asesinadas.

El atentado perpetrado por ETA el 19 de junio de 1987 se saldó con 21 víctimas mortales y 45 heridos y supuso un cambio en la forma de actuar de la organización terrorista, que por primera vez atacó de forma indiscriminada contra civiles. Ese día, hace 31 años, los autores del atentado pusieron treinta kilos de amonal y cien litros de un líquido inflamable en bidones escondidos en el maletero de un coche que estacionaron en el aparcamiento, y que explotó a las 16:30 horas con una bola de fuego que abrasó y asfixió a empleados y clientes.