La ministra de Sanidad, Ana Mato, ha contestado que "lo que podemos decir es lo que sabemos a través de los medios de comunicación", al ser preguntada este viernes por el estado de salud de la auxiliar de enfermería Teresa Romero, ingresada en el Hospital Carlos III de Madrid infectada de ébola. También ha anunciado que el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas han acordado rebajar el criterio de fiebre para sospechosos de ser portadores del virus del ébola a 37,7 grados, que anteriormente era de 38,6 grados. Además, los profesionales sanitarios que hayan estado en contacto con una persona contagiada de ébola pasan ahora a ser considerados de alto riesgo, lo que implica su ingreso y aislamiento en un centro hospitalario.

Mato ha negado una vez más que se hayan cometido errores en la gestión de la crisis y ha asegurado que se ha venido actuando con total “transparencia y rigurosidad”. La ministra ha reivindicado su labor y ha hecho un llamamiento para evitar “generar alarma”. Tampoco ha querido valorar si se siente desautorizada después que este viernes el Consejo de Ministros haya confirmado que será la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, la que tome el mando de la célula de crisis.

Los consejeros de Sanidad han evitado el debate político y han querido dar un apoyo público a la ministra de Sanidad, compareciendo con ella en la rueda de prensa posterior a la reunión, que se ha celebrado en la sede del ministerio, en Madrid.