Paleontólogos argentinos han anunciado el descubrimiento de los restos fósiles del que posiblemente, atendiendo a las descomunales dimensiones del fémur, es el mayor dinosaurio conocido hasta la fecha en el mundo. Según sus cálculos, se trata de un saurópodo que medía 40 metros de largo y 20 de alto y que pesaba unas 77 toneladas, el equivalente a unos 15 elefantes africanos.

Vivió hace unos 95-100 millones de años, en el Cretáceo tardío.

Los primeros huesos fueron descubiertos hace seis años por un agricultor de La Flecha, una localidad situada 260 kilómetros al oeste de Trelew, en la provincia argentina de Chubut, que se tropezó con ellos accidentalmente. Sin embargo, no fue hasta enero del 2013, al iniciarse los trabajos de excavación, cuando se observó la magnitud real del descubrimiento.

Los fósiles fueron excavados por un equipo de paleontólogos dirigidos por José Luis Carballido y Diego Pol, del Museo Egidio Feruglio de Trelew.

La familia de los saurópodos

Los saurópodos, entre los que se incluyen los famosos diplodocus, braquiosaurios y aragosaurios, son considerados los animales terrestres de mayor tamaño que han habitado la Tierra. Hasta ahora, el récord de peso correspondía a un argentinousario descubierto en la provincia vecina de Neuquén en 1989. Se le calcularon 70 toneladas. De hecho, la Patagonia es una región particularmente rica en fósiles de dinosaurio.

En el trabajo de excavación se desenterraron los esqueletos parciales de siete especímenes, con 150 huesos en total, y en muy buen estado de conservación. Solo faltan los cráneos. El fémur con el que los paleontólogos posaron para la posteridad mide 2,4 metros.

"Dado el tamaño de estos huesos, que superan a cualquiera de los animales terrestres conocidos previamente, es el mayor animal conocido que caminó sobre la Tierra", ha asegurado a la prensa local Rubén Cúneo, director del museo. El nuevo saurópodo todavía no tiene nombre.

"Cuando nos pusimos a excavar el fémur, nos sorprendimos por el tamaño, pero nos quedamos más impactados aún a medida que íbamos clavando el pico y nos encontrábamos con costillas, caderas, cola completa, húmero... Todo ello nos deja ver que eran animales grandes que comían y se movían en grupo", ha dicho José Luis Carballido.