El polifacético Paul Mazursky, director, guionista y actor candidato en cinco ocasiones al Óscar, ha muerto este lunes a los 84 años en el centro médico Cedars-Sinai de Los Ángeles debido a complicaciones respiratorias, según ha informado este martes una portavoz de su familia. Mazursky estuvo nominado al Óscar en cinco ocasiones por películas como 'Bob & Carol & Ted & Alice (1969), 'Harry y Tonto (1974), 'Una mujer descasada' (1978) o 'Enemigos: una historia de amor' (1989).

Sus trabajos, que lograron fama por su ácida y satírica mirada hacia las relaciones sentimentales, llena de historias sobre infidelidades e intercambios de parejas, le convirtieron en una de las figuras más respetadas de Hollywood entre las décadas de 1960 y 1970. Escribió las 17 películas que dirigió y 'Harry y Tonto' (1974) le deparó un Óscar al mejor actor a Art Carney. Jill Clayburgh fue nominada por 'Una mujer descasada' mientras que Dyan Cannon y Elliot Gould lo fueron por 'Bob & Carol & Ted & Alice'.

Risas y lágrimas

"Parece que tiendo de forma natural hacia el humor y que hago a la gente reír", decía Mazursky hace años al diario 'Chicago Tribune', "pero creo que en mí existe una dualidad". "Me gusta hacer llorar también a la gente. Me gusta trazar esas relaciones. La película perfecta, para mí, retrata ambas caras", añadía.

Mazursky también consiguió dos nominaciones a los Globos de Oro por el guión y la dirección de 'Una mujer descasada' y optó al Emmy en dos ocasiones por el guión de 'El show de Danny Kaye' (1963).

Comparado con Allen y Bergman

Como actor se convirtió en uno de esos rostros secundarios infalibles gracias a títulos como 'Ha nacido una estrella' (1976), 'Carlito's Way' (1993), 'Love Affair' (1994) o 'Miami Rhapsody' (1995), un filme donde aparecía Antonio Banderas, quien lo dirigió en 'Crazy in Alabama' (1999).

Sus últimos años los dedicó especialmente a la televisión, donde trabajó en series como 'Curb Your Enthusiasm' y 'The Sopranos'. El cineasta, comparado en ocasiones por su tipo de cine con Woody Allen --con quien además compartía origen judío y neoyorquino-- e Ingmar Bergman, recibió una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood el año pasado. Una de sus últimas películas fue precisamente dirigiendo a Allen y a Bette Midler en la comedia 'Escenas en una galería' (1991).