Tenía 40 años, seis hijos y se ganaba la vida transportando mercancía desde Ceuta hasta Marruecos. Ha muerto en la localidad de Fnideq (vecina de la ciudad española de Ceuta), en una nueva avalancha humana en el punto fronterizo de Tarajal, según ha confirmado el Ministerio de Interior marroquí y Efe.

La mujer falleció a causa de la muchedumbre que se agolpó, como cada mañana, en las entradas de Ceuta, y provocó una avalancha, añadió la fuente.

La avalancha hizo que resultaran contusionadas en el nuevo paso del Tarajal II seis personas, que necesitaron hospitalización en el Hospital Hasán II de Castillejos (Fnideq en árabe), pero una de ellas, que había perdido el conocimiento, ya ingresó cadáver, según las fuentes oficiales.

Del lado español, cuatro mujeres y un hombre -que habitualmente se dedican al tránsito de mercancías entre Ceuta y Marruecos- han sido atendidos en el hospital Universitario de la ciudad. Los cinco según ha informado a Efe el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA), han sido atendidas en el hospital de distintas policontusiones producidas por los golpes, aunque ya han recibido el alta al no ser necesaria su hospitalización.

El presidente del Observatorio del Norte de Derechos Humanos, Mohamed Benaísa, ha añadido que el suceso ha causado una gran indignación entre las numerosas personas que viven del pequeño contrabando -acarrean enormes bultos a sus espaldas- entre Ceuta y Marruecos, y esta misma mañana han celebrado una marcha espontánea para protestar por lo sucedido y pedir mayor seguridad.

El de hoy es el segundo caso de una porteadora muerta en la frontera en menos de un mes. El pasado 26 de marzo una joven marroquí de 22 años falleció en el Hospital Provincial de Tetuán varios días después de verse envuelta en una avalancha parecida, en su caso registrada en sentido de salida hacia el país vecino por el mismo 'Tarajal 2', que fue inaugurado a finales de febrero.

La reciente apertura del nuevo paso fronterizo de Tarajal II ha provocado un "efecto llamada" que, en lugar de hacer más fluido el tráfico de personas y mercancías, parece haber multiplicado las complicaciones.

Las Fuerzas de Seguridad marroquís y españolas están aplicando este lunes por primera vez y "a rajatabla" las nuevas condiciones de regulación de la entrada en Ceuta de vehículos, a cuyos conductores se exige contar con seguro internacional y ser los propietarios de los automóviles para poder entrar en territorio español.