Tres españoles fallecieron y otros dos del mismo grupo resultaron heridos en una avalancha de nieve ocurrida al final de la tarde del sábado en el cantón suizo de Valais, según confirmó ayer el Ministerio de Asuntos Exteriores español. Los fallecidos son dos hombres y una mujer, de los que no se ha facilitado aún su identidad ni procedencia, al igual que de los heridos, un hombre y una mujer, según las mismas fuentes.

Los heridos abandonaron ayer por la tarde el hospital, donde recibieron atención por heridas relativamente leves, así como atención psicológica por el trauma sufrido. Mientras tanto, las autoridades suizas han iniciado el proceso de identificación formal de los tres alpinistas fallecidos, entre los que no había ningún menor, como tampoco entre los heridos.

El grupo de alpinistas español se encontraba en el sector entre Fiesch y la estación de esquí de Fiescheralp (Valais), a una altura de 2.450 metros, cuando fueron sorprendidos por la avalancha mientras realizaban una travesía fuera de pista.

La legislación en Suiza es sumamente estricta en lo relativo a la confidencialidad y protección de datos personales, por lo que no se comunica la identidad de las personas involucradas en accidentes u otro tipo de siniestros, sean nacionales o extranjeros. «La identificación está en marcha de acuerdo al procedimiento establecido y que se debe respetar», explicó el portavoz de la Policía cantonal, Mathias Volken. «Nosotros no podemos comunicar el nombre de las víctimas, a lo sumo si el fiscal lo autoriza podemos indicar el país y la localidad de la que provenían», señaló el portavoz policial.

La policía suiza, que ha abierto una investigación sobre el suceso, sí que ha trascendido que está en comunicación con las familias de las víctimas a través del Consulado de España en Ginebra y serán ellas las que decidirán los detalles de la repatriación de los restos en cuanto las autoridades suizas concluyan con todo el proceso de identificación.

AVISO RÁPIDO

La operación de rescate del grupo de alpinistas españoles empezó poco después de la avalancha gracias a que los servicios de socorro fueron advertidos por teléfono por una persona de otro grupo que pudo evitar el alud a tiempo y que vio cómo los montañistas eran cubiertos por la nieve.

La búsqueda tuvo que interrumpirse durante la noche del sábado debido a las malas condiciones meteorológicas, pero pudo reanudarse esta mañana y ayer al mediodía se pudo ya liberar los cuerpos atrapados en la nieve de los fallecidos. Se trató de una operación de rescate complicado debido precisamente a las inclemencias metereológicas que asolaban la zona de los Alpes suizos.