El narcotraficante Laureano Oubiña y la presidenta de la asociación Érguete, Carmen Avendaño, una de las conocidas como madres coraje gallegas, se verán las caras este martes en los juzgados de Vilagarcía de Arousa. La jueza que instruye la demanda interpuesta por el narco contra la responsable del colectivo antidroga, a la que le reclama 150.000 euros por un presunto delito contra el honor, los ha citado para que comparezcan en vista previa, tras un aplazamiento en diciembre porque estaba de baja.

Los hechos por los que Oubiña la denunció se remontan a marzo del año pasado. Poco después de obtener la libertad condicional el narcotraficante concedió una entrevista radiofónica. En el transcurso de la misma la responsable del programa introdujo una grabación en la que la presidenta de Érguete aseguraba tener conocimiento de que Oubiña también ha traficado con otro tipo de drogas" y no solo con cannabis. Las tres condenas que le han impuesto a Oubiña han sido por el tráfico de esta sustancia estupefaciente y por blanqueo de capitales. En su escrito de acusación, la defensa de Oubiña, que reclama una indemnización de 150.000 euros, considera que esta afirmación es "infame, perversa y maligna".

La presidenta de Érguete ha manifestado en varias ocasiones estar convencida de que "el motivo de la denuncia interpuesta contra ella no es por una cuestión de honor sino por un ajuste de cuentas" contra una de las personas que más activamente contribuyó a desatar la operación Nécora, en junio de 1990.

En aquella época esta madre coraje era la responsable del colectivo de madres contra la Droga y encabezó una histórica protesta a las puertas del pazo de Baión, cuyo propietario era entonces Oubiña.