Nueve personas, entre ellas un bebé de un año y otro niño de 7, perdieron la vida y otras 32 resultaron heridas de diversa consideración después de producirse una explosión durante el transcurso de un concierto de Nochevieja que se celebró en Peureulak, localidad al este de la provincia de Aceh, en Indonesia. Fuentes policiales achacaron el atentado perpetrado a un movimiento independentista.