La directora de salud pública y determinantes ambientales y sociales de la salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Maria Neira, ha hecho un llamamiento a la "calma, serenidad y proporcionalidad" con el coronavirus. "Estamos muy preocupados en la OMS por los efectos colaterales del virus que afectan a la economía y a la sociedad, que pueden colapsar nuestros sistemas sanitarios y que no corresponden a la lucha contra el virus", ha explicado durante un congreso de alimentación organizado por Aecoc y FIAB.

Neira ha advertido que hay dos cosas que van en paralelo pero que hay que diferenciarlas. Una es el virus y otra, "que no tiene nada que ver" con él, es el "miedo" que se ha generado, motivado por "imágenes de ciudades cerradas y bloqueadas por militares" y decisiones como la cancelación de eventos como el Mobile o el Salón de Ginebra o el cierre del Mueso Louvre de París. "Tenemos que apostar por la racionalidad", ha advertido la experta.

"Cada medida que se toma genera un percepción de riesgo en los ciudadanos", ha recordado y por eso recomienda a las empresas tomar decisiones "basadas en un criterios lógicos". Es decir, medidas basadas en las recomendaciones de las autoridades sanitarias y siempre "con una justificación científica". De lo contrario, se genera una percepción de riesgo "mucho más elevada" de la que será muy difícil salir para explicarle al ciudadano más tarde que no hay "un riesgo real".

"Entre todos tenemos que volver a ese balance y equilibrio concentrados en luchar contra el virus pero sin el resto de cascada de medidas que no ayudan a la contención de la epidemia", ha asegurado. Neira ha recordad, de hecho, que cuando se declara un problema de salud pública de extensión internacional es necesario tomar "medidas de contención" evitando siempre el "efecto negativo" en la sociedad y en la economía. "Pero no ha sido posible", ha lamentado respecto a la caída de las bolsas y el pánico económico surgido.

PONER EN CONTEXTO EL VIRUS

Neira ha pedido poner "en contexto" el virus. "En un país como España, con 47 millones de habitantes, hay 125 casos, podrá haber más, nadie lo descarta, pero hay que poner las cosas en proporción", ha asegurado y ha recordado algunas cifras, como que el 80% de personas en contacto no desarrollan síntomas o que la tasa de mortalidad es del 0,7%.

En este sentido, la representante de la OMS ha aplaudido la labor de las autoridades sanitarias españolas que "lo están haciendo muy bien", ha dicho, "resistiendo presiones y tomando medidas solo basadas en la ciencia". "Hay muchas razones para que el ciudadano español se sienta sereno", ha añadido, y ha reconocido que el alarmismo podría poner en riesgo el sistema hospitalario. "Hay gente angustiada, preocupada y con una ansiedad que tampoco es buena para la sociedad. La gente además se va a precipitar a ir a los hospitales y los hospitales los necesitamos para otros motivos médicos", ha alertado.

"¿El virus está?, sí; ¿se va a propagar?, sí; ¿hay que hacerle frente?, sí, por supuesto; sabemos cosas del virus, sí, con lo cual vamos a centrarnos en esas cosas (...) Empieza a verse una bajada en el número de casos en China, con lo cual concentrémonos en ese tipo de cosas y dejemos trabajar a las autoridades sanitarias, a la OMS y a la Unión Europea", ha concluido.