La ONCE podrá acumular botes en su tradicional cupón para atraer a los jugadores, desarrollar un juego activo similar a las loterías primitivas y comercializar una lotería instantánea, como el popular rasca-rasca . El ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, y el presidente del consejo general de la organización, Miguel Carballeda, llegaron ayer a este acuerdo tras casi un año de negociaciones.

El pacto tendrá una vigencia de ocho años. La organización se compromete a crear 8.000 puestos de trabajo y plazas ocupacionales para discapacitados.

El cupón, el producto estrella de la ONCE, se mantendrá en el 55% de la emisión del porcentaje máximo de premios. Subirá su precio cada año 0,5 euros a partir del 2006. Actualmente se vende a tres euros. La novedad radica en que se podrán acumular premios de sorteos anteriores, excepto en los celebrados entre el 15 de noviembre y 15 de enero. Entre estas fechas, la ONCE tampoco podrá celebrar los cinco sorteos extraordinarios anuales que fija el acuerdo, para no coincidir con los sorteos de la Lotería Nacional.

La lotería instantánea será comercializada conjuntamente con el Organismo de Loterías y Apuestas del Estado. Según el acuerdo, la venta comenzará a realizarse al 50% en los quioscos de la ONCE y en los despachos de lotería, a partir del 1 de enero del 2005.

Sin embargo, el acuerdo deja en suspenso la pretensión de la ONCE de crear un sorteo extraordinario de Navidad y de intervenir en la lotería Euromillonaria , en la que participarán Francia, Reino Unido y España.