El fundador de la oenegé Proactiva Open Arms, Òscar Camps, lanzó ayer un duro mensaje a los países de la UE, de los que aún espera que se ofrezcan como puerto seguro para acoger a los 121 migrantes rescatados por el Open Arms en aguas internacionales del Mediterráneo. Cifra a la que se le sumaron esta pasada madrugada otras 39 personas de un nuevo rescate del barco. «Ningún político evitará que Open Arms proteja la vida humana en el mar», afirmó Camps, en un mensaje que también tenía en Matteo Salvini, el ultraderechista ministro del Interior italiano, a un claro destinatario.

El activista español acusó a los gobiernos europeos de poner en marcha «toda la maquinaria administrativa» para no salvar vidas, contraviniendo los convenios internacionales y la ley marítima internacional. Lo dijo ayer en el aeropuerto de Lampedusa (Italia) durante una rueda de prensa con el presidente de Open Arms Italia, Riccardo Gatti, el actor Richard Gere y el fotógrafo y chef Gabriele Rubini.

«Esta Europa desmemoriada no permite que estas personas, cuyas vidas corren peligro, puedan utilizar vías seguras (para llegar al continente). Si no las tienen lo que está haciendo Europa es entregar esas vidas al crimen organizado, cuando simplemente podrían utilizar un derecho que ya tienen», sentenció Camps.

La prueba más evidente de que el Open Arms no piensa abandonar su labor humanitaria fue el rescate de otros 39 migrantes en las costas de Malta, una operación llevada a cabo la pasada madrugada. Malta, en este caso, se ofreció a acoger a estas personas pero no a los 121 refugiados que llevan ya nueve días a bordo de la embarcación a la espera de poder desembarcar en algún puerto y dar asistencia a los migrantes, cuyas condiciones de salud y seguridad empiezan a deteriorarse. La oenegé ha considerado «inadmisible» la oferta de Malta de acoger solo el último grupo de migrantes.

Por su parte, España ni se replantea su posición ni liderará la iniciativa para que algún puerto acoja al barco. Así lo comunicó ayer en rueda de prensa la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, que rechaza que se interpele a España para el rescate de los migrantes a bordo del Open Arms: «No somos un Gobierno que pueda estar interpelado en esta situación», ya que «no somos el puerto más seguro y tampoco el más cercano». Además, Calvo destacó que España es el país «que más cumple con sus obligaciones humanitarias. Quienes cruzan el Estrecho se encuentran un país seguro y responsable todos los días». «Nos mantenemos en el espacio que nos corresponde», zanjo la líder socialista.

CRÍTICAS DE GERE

En la rueda de prensa también participó Richard Gere, que el viernes visitó y llevó víveres a los migrantes del Open Arms. El actor estadounidense criticó con dureza la ley antiinmigración de Salvini, que impone multas a las oenegés que salvan vidas en el mar. El veterano actor subrayó la necesidad de acoger a los migrantes que llegan a Europa y acumulan «historias de gran sufrimiento».

Gere agregó que decidió visitar la embarcación el viernes y llevar provisiones para los migrantes y la tripulación de «forma espontánea», sin que nadie le llamara, como gesto de apoyo «a unas personas que no son inmigrantes, sino refugiados». «Nadie me dijo que viniera. Vine de forma espontánea. Estaba pasando las vacaciones con mi familia cerca de Roma y después de que se aprobara el decreto ley antiinmigración, una ley que nadie se podía creer, decidí visitar el barco de Open Arms que conocí en Barcelona».Gere también lamentó que exista «una cierta paranoia generalizada, un temor a ayudar al extranjero», e insistió en que estas personas «no son inmigrantes, sino que son refugiados». El actor quiso ser la voz de las mujeres refugiadas en el barco y subrayó que casi todas han sido «violadas y torturadas» en Libia. También mencionó el caso de «una familia de mujeres, abuela, madre y nietas», que han huido de su país sufriendo torturas, para buscar otra vida. «Estarán marcadas por estas tragedias, pero sus vidas continúan».

El ministro italiano no tardó en responder a la estrella. «Dado que este generoso millonario está expresando preocupación por el destino de los migrantes del Open Arms, le agradecemos que pueda llevar de regreso a Hollywood, en su avión privado, a toda la gente a bordo y darles cobijo en sus villas. ¡Gracias, Richard!».