El barco de la oenegé española Proactiva Open Arms, que se dirige hacia España con un grupo de 87 inmigrantes a bordo, todos ellos rescatados en el Mediterráneo, solicitó ayer a la Armada que le abastezca de raciones de comida, agua y medicamentos. El Open Arms tiene previsto llegar al puerto de Algeciras, donde ha sido autorizado a atracar por el Gobierno central, a las diez de la mañana de mañana jueves, justo una semana después del rescate, según explicó su portavoz, Laura Lanuza.

La travesía, agregó Lanuza, se les está haciendo larga tanto a la tripulación como a las personas rescatadas. Todos tienen «ganas de llegar», explicó la cooperante. También detalló que desde el lunes el Open Arms va «muy justo de provisiones», por lo que han pedido estas 87 raciones para los inmigrantes, unos víveres que la oenegé esperaba anoche que la Armada les hiciera llegar mediante una lancha neumática. Entre los 87 migrantes hay ocho menores, seis de ellos no acompañados

Sobre el combustible, la portavoz afirmó que en los grandes depósitos del Open Arms hay gasóleo de sobra para llegar a Algeciras y que, en el caso de que tuvieran necesidad, la Armada se ha ofrecido a suministrárselo.

El dispositivo de llegada en el puerto de Algeciras «ya está preparado», indicaron fuentes del Gobierno, que añadieron que no está la prevista la presencia de ningún representante gubernamental en el puerto gaditano. «Se ha escogido Algeciras porque es lo más adecuado», concluyeron.

El Gobierno de la Generalitat de Cataluña y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, pusieron a disposición del Open Arms los puertos catalanes para que pudiese atracar la embarcación, antes de conocerse la autorización oficial a desembarcar en Algeciras. También Valencia ofreció sus «infraestructuras» y «recursos económicos y humanos».