La brutalidad de los narcos en su lucha por defender los cargamentos de droga demostró este viernes su cara más dura en Algeciras (Cádiz). Un agente de Policía Nacional se encuentra en estado grave tras ser embestido por un todoterreno robado y cargado de hachís, cuyo conductor fue detenido poco después. Los sindicatos policiales no han ocultado su indignación por el incidente, volviendo a reclamar más medios para combatir al narco, así como el reconocimiento como zona de especial singularidad de la comarca del Campo de Gibraltar.

Fuentes de la Policía explicaron que el atropello tuvo lugar la pasada madrugada, sobre las 6,55 horas, en la conocida como carretera de los Yankies que une la N-340 con la ciudad gaditana. Los agentes habían tenido noticia del desembarco de un alijo de droga en la Punta Carnero y dispusieron allí un dispositivo para interceptar el cargamento que portaba un vehículo de alta gama, un BMW X5 que había sido robado en Marbella (Málaga). Se trata de una práctica habitual entre los narcotraficantes, ya que estos potentes vehículos les permiten escapar a mayor velocidad de la Policía o incluso, como en esta ocasión, embestir a los patrulleros sin sufrir apenas rasguños.

El agente herido cruzó el coche policial en la carretera para forzar que el todoterreno se parase. Pero cuando se disponía bajar para darle el alto al vehículo sospechoso, éste embistió el coche patrulla, que quedó destrozado y volcado en el arcén, según las fuentes. El agente que conducía, que es coordinador de de Servicios de la Policía Nacional en Algeciras, se llevó la peor parte. Sufre heridas de gravedad en la tibia y el peroné, y tuvo que ser intervenido de urgencias en el Hospital Punta de Europa, donde los medicos intentaban salvarle el brazo. Su acompañante, un agente en prácticas, resultó herido leve con contusiones y una luxación en el hombro, y fue dado de alta poco después.

El todoterreno también resultó dañado a causa del impacto, y su conductor, un joven de 27 años, fue detenido en esos momentos y pasará a disposición judicial en las próximas horas por los supuestos delitos de, al menos, conducción temeraria y tráfico de drogas. El suceso se produce apenas tres días después de que otros tres guardias civiles resultaran heridos con disparos de escopeta cuando trataban de localizar una plantación de marihuana en la serranía de Cádiz. Unos hechos que denotan la agresividad con la que los narcos tratan de defender unos cargamentos de droga que cada vez les cuesta más introducir en nuestro país.

En este sentido, desde Jupol, uno de los sindicatos policiales, reclamaron al Ministerio del Interior que acometa de una vez por todas el refuerzo necesario de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, tanto en personal como en medios técnicos y materiales, en las zonas calientes de tráfico de drogas para poder evitar así incidentes graves como los ocurridos en el Campo de Gibraltar. El secretario general de la organización, José María García, insistió además en la necesidad de atender la reivindicación histórica de medios para la Policía Nacional, ya que en la actualidad los agentes están perdiendo el principio de autoridad y en muchos casos ni siquiera se ven amparados por la ley.