El aeropuerto de Barcelona ha logrado un récord histórico al superar en un 0,2% los usuarios del 2012 y cerrar el 2013 con 35.210.735 pasajeros, gracias al empuje del tráfico internacional de fuera de la Unión Europa (UE), que ha crecido el 12,9%, y a los viajeros intercontinentales, que han aumentado el 11,2%.

El segundo factor de incremento de actividad en El Prat se debe al tráfico de la UE, que aumentó el 3,4%, mientras que el tráfico nacional continúa la tendencia de caída y ha disminuido el 11,2%, según los datos de balance anual de Aena Aeropuertos.

Por mercados, el que experimenta un mayor crecimiento es el de Oriente Medio, con un incremento del 34,4% gracias a las rutas a Qatar y Emiratos Árabes operadas por Qatar Airways y Emirates, respectivamente.

África ha crecido el 25,4% debido al incremento de frecuencias y destinos, y el sector internacional de fuera de la UE y del espacio Schengen ha repuntado el 21,8% gracias a los vuelos con países como Turquía, Ucrania y la Federación Rusa, que es el sexto mercado en cuando a pasajeros de origen y destino del aeropuerto de El Prat.

MÁS DE 100.000 TONELADAS

Respecto a la carga, el aeropuerto de Barcelona superó las 100.000 toneladas en 2013, un 3,9% más, y en el último mes del año se gestionaron más de 8,96 millones de kilogramos de mercancías, un 10,9% más.

Las importaciones crecieron un 5,5% en 2013 con más de 49,3 millones de kilogramos transportados, una cifra similar a las exportaciones: más de 50,9 kilogramos, un 2,5% superior al dato de 2012.

Según Aena, Alemania, Qatar y Emiratos Árabes son los principales países con los que se establecen conexiones de carga desde el Aeropuerto de Barcelona, aunque por primera vez Hong Kong aparece entre los 15 principales países en cuanto a mercancías acumuladas, gracias a Cargolux.

GIRONA CAE Y REUS CRECE

En cuanto al resto de los aeropuertos catalanes, el de Girona-Costa Brava registró en el 2013 más de 2,73 millones de pasajeros, el 3,8% menos, y operó 27.050 vuelos, lo que también supone un descenso del 2,3%, mientras que sólo en diciembre 66.355 usuarios pasaron por las instalaciones de Vilobí d'Onyar el 27,5% menos y se efectuaron 970 despegues y aterrizajes, lo que supone un descenso del 10,6%. Por el contrario Tarragona perdió el 3,5% de actividad.

El aeropuerto de Reus ha conseguido cerrar con un balance positivo, ya que por esta infraestructura han pasado a lo largo del año pasado 977.166 pasajeros, un 3,6% más, y los vuelos crecieron un 5,4%, hasta las 16.977 operaciones.

El aeropuerto de Sabadell, centrado en la aviación general y deportiva, ha logrado suavizar el descenso de los últimos años y registró 27.734 movimientos en el último año, un 4,5% menos, y en diciembre operó 2.135 movimientos de aeronaves, un 3,5% menos.