La jueza dictó ayer prisión comunicada sin fianza para el agente de la Policía Nacional, de 38 años, que la madrugada del pasado sábado mató de media docena de disparos a su pareja, una vecina de Olot (Gerona) de 44 años y madre de dos hijos, y luego intentó suicidarse de un disparo en la cabeza.

Una comitiva judicial se desplazó ayer al Hospital Trueta, donde permanece ingresado el detenido, Cesar V.G. Pero el investigado se acogió a su derecho a no declarar y la jueza acordó prisión provisional, comunicada y sin fianza, además de abrir causa por un delito de asesinato, sin que consten denuncias previas entre la pareja. El fiscal había pedido prisión para este policía, destinado desde hace tres años a la Unidad de Extranjería de Camprodón (Gerona), como presunto autor de un delito de asesinato con el agravante de violencia de género.

Los hechos habrían sucedido la madrugada del sábado. Sobre la 01.00 horas, la hija de la víctima, de 24 años, y su novio llegaron a su piso. Media hora más tarde llegó la madre, Irene L.L. de 44 años. Y poco después llegó el policía, con quien la víctima hacía entre un año y medio y dos que mantenía, según diversos testigos, una relación turbulenta con continuas peleas.