El riesgo de transmisión del VIH en parejas gays en las que sólo uno está infectado es cero si se sigue adecuadamente el tratamiento antirretroviral, según un estudio en el que han participado el Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa, BCN Checkpoint y la Fundación Lucha contra el Sida.

La investigación, que publica este viernes la revista 'The Lancet', ha seguido a 782 parejas gais durante dos años y ha confirmado que una carga viral indetectable hace imposible transmitir el VIH, además de reafirmar los beneficios de hacerse la prueba periódicamente y empezar el tratamiento lo antes posible.

El tratamiento contra el VIH ha evolucionado mucho en los últimos años, hasta el punto que existen más de 30 fármacos para combatir el virus, fruto de la combinación de 23 principios activos.

Esta mejora ha permitido incluso que la esperanza de vida de las personas con VIH sea similar a la de la población seronegativa, aunque tanto médicos como el colectivo LGTBI reconocen que el estigma social no se ha disipado.

"Uno de los principales motivos de rechazo es el miedo a la infección, en la mayoría de los casos originada por el propio desconocimiento", ha explicado Pep Coll, médico e investigador de la Fundación Lucha contra el Sida, BCN Checkpoint e IrsiCaixa.

Estos tres centros han participado en el estudio Partner 2, que ha seguido durante dos años a 782 parejas gais serodiscordantes, es decir, en las que sólo uno de sus miembros tiene el VIH, que practicaron un total de 76.000 actos sexuales sin utilizar preservativo ni otro método de prevención adicional.

Durante este tiempo, sólo se han diagnosticado 15 nuevas infecciones dentro del grupo, pero ninguna de ellas estaba vinculada con la pareja seropositiva en tratamiento y por lo tanto estarían ligadas a relaciones con otras personas.

El estudio, liderado por el University College de Londres y la Universidad de Copenhague, ha implicado a 75 centros de 14 países.

Los investigadores han confirmado, mediante pruebas genéticas del virus a través de las cuales se puede trazar el origen de la infección, que los 15 nuevos casos detectados no se produjeron por relaciones dentro de la pareja.

"Este hecho proporciona evidencias sólidas de que el riesgo de transmisión del VIH en parejas homosexuales a través del sexo sin condón cuando la carga viral está suprimida es cero, por lo que podemos asegurar que el tratamiento del VIH es una valiosísima herramienta de prevención", ha resaltado Coll.

"Esta información -según el médico- no sólo es vital para informar sobre la profilaxis del VIH, sino que proporciona pruebas sólidas para ayudar a romper el estigma que aún lleva asociado".

Coll ha detallado que, para alcanzar los niveles indetectables, normalmente se requieren unos 6 meses de terapia antirretroviral, dependiendo de los fármacos empleados, y es imprescindible que el tratamiento no se interrumpa nunca.

Esta supresión viral se debe controlar con regularidad para garantizar un buen estado de salud de las personas en tratamiento, así como los beneficios implícitos para la salud pública ya que se rompe la cadena de transmisión del VIH.

"Todo ello -ha afirmado Coll-, apoya el mensaje de la campaña U=U (indetectable igual a intransmisible, por sus iniciales en inglés) y refuerza los beneficios de hacerse la prueba periódicamente y empezar el tratamiento tan pronto como sea posible".