La Guardia Civil detuvo ayer a seis personas, cuatro de ellas en Castellón y las otras dos en Tarragona, por delitos de corrupción, abusos sexuales a menores, tenencia de pornografía infantil y tenencia ilícita de armas tras abusar de un niño de 12 años y se incautó de más de 20 gigas de material pedófilo. Cuatro de los detenidos, todos ellos de nacionalidad española, ingresaron en prisión, informa Efe.

La operación, denominada Bambino, se ha desarrollado en tres fases a lo largo de un año. Se inició a raíz de una denuncia presentada en el cuartel de la Guardia Civil de Vinaroz (Castellón) en abril del 2017 por la madre de un menor que relataba que su hijo podía haber intercambiando archivos de índole sexual con personas mayores de edad.

Tras analizar los correos electrónicos se comprobó que el menor habría sido víctima de abusos sexuales cometidos por los ahora detenidos. Así, se inició una investigación para identificar físicamente a los implicados a través de los correos electrónicos que enviaban, en los que pedían material pedófilo y con los que llegaron a convencer al menor para mantener encuentros sexuales.

Uno de los investigados llegó a tener varias identidades ficticias (muchas de ellas como menor de edad) para persuadir a la víctima para seguir obteniendo archivos pedófilos.