Una sobrecarga eléctrica en la primera planta, donde la luz estaba pinchada y que, según los vecinos, los inquilinos ocupaban de forma irregular, es la principal hipótesis del origen del virulento incendio que, el pasado sábado, causó tres muertos y una treintena de heridos en un edificio de diez plantas de Badalona.

En la mañana de ayer, un equipo formado por técnicos de Urbanismo de Badalona y Bomberos visitaron el edificio para analizar la estructura. «Cuando tengamos la aprobación definitiva acordaremos con las familias cuándo pueden entrar a buscar sus pertenencias», apuntó el segundo teniente de alcalde de Badalona, Jordi Subirana.

También ayer se desplazaron hasta el inmueble agentes de los Mossos d’Esquadra para llevar a cabo una inspección ocular de la zona. Sin embargo, pese a que fuentes policiales apuntan al accidente eléctrico como explicación más plausible, los responsables municipales declinaron pronunciarse sobre el origen de las llamas y la posibilidad de que el inmueble donde comenzó el fuego estuviera ocupado. «Llevamos todo el día hablando de una hipótesis principal -explicó el alcalde de Badalona, Àlex Pastor-. Para mí, todo puede ser una hipótesis válida porque la comitiva judicial aún no ha emitido el informe definitivo, con lo cual todavía no se saben las causas del incendio».

Todos los testigos consultados por este diario coinciden en que el primer piso donde se originó el fuego estaba ocupado desde hacía varios años. «Lo que pasa es que los vecinos tienen miedo de hablar porque aquí hay mucha gente ocupando viviendas y pinchando la electricidad», comentaba ayer una vecina del edificio colindante. «El primer piso estaba ocupado por una quincena de personas de origen rumano desde hacía más de tres años», añade otro vecino del bloque incendiado.