Tal como su sonriente futuro, Alessia, la bebé italiana que resistió un trasplante de varios órganos en Miami, regaló ayer sonrisas a los periodistas. La niña fue la estrella de una multitudinaria presentación en sociedad en que el grupo de ocho médicos que practicó la operación y que incluye a un cirujano español, aseguró que la ausencia de complicaciones parecía indicar que la niña puede aspirar a una vida normal.

"En estos casos es difícil hacer predicciones pero la ausencia de rechazo e infecciones, las mayores amenazas en los trasplantes, nos permite esperar que siga reaccionando como hasta ahora", dijo el doctor Juan Rufino Madariaga, quien estudió en la universidad de Valladolid.

"Cuando la recibimos era un caso desesperado. Sin operación habría muerto. Ahora ya la ves, ríe, llora, ha subido de peso, y puede ser dada de alta en dos semanas", agregó. El doctor Andreas Tzakis, quien dirigió el equipo médico, informó que "si todo va bien, Alessia podría retornar a Italia en unos dos meses".

Asimismo el médico destacó "la bondad" de los padres que autorizaron la donación, "que hizo posible que salváramos a Alessia".

Monica Di Matteo, la madre, de 37 años, resumió su agradecimiento en una sola palabra: "Grazie". "Mi hija es un milagro gracias a la familia que autorizó la donación, a mis doctores italianos y a los médicos de aquí", agregó. Con respecto al futuro de su hija, que curiosamente cumplió ocho meses, recibió ocho órganos y fue operada por ocho médicos, fue escueta pero contundente: "Sólo quiero que sea feliz".

La vida de Alessia se inició en el puerto de Génova, el 4 de julio del 2003. Nació con un desorden muscular congénito que afectaba a los riñones, los intestinos y el estómago y que podía ser fatal si no era tratado. Fue intervenida quirúrgicamente varias veces en el hospital pediátrico en Génova hasta que ya no había nada que hacer sino un arriesgado trasplante múltiple.

Donante adecuada

Gracias a la intervención del gobierno italiano, que pagó todos los gastos de la niña, Alessia llegó el 13 de enero a Miami con su madre. El 31 fue intervenida durante doce horas y recibió un hígado, un estómago, un páncreas, un intestino delgado, un intestino grueso, un bazo y dos riñones nuevos.

"Tuvo la suerte de conseguir la donante perfecta en pocos días y pudimos realizar una intervención que marca un récord en este hospital por su éxito y por el número de órganos trasplantados simultáneamente", explicó Tzakis, quien añadió: "Alessia tiene la posibilidad de una vida normal, de ir al colegio y de ser como cualquier niña". Alessia intuye que el médico tiene razón y por eso ya sonríe.