Los vecinos y comerciantes que han vivido de cerca la explosión de la fábrica de óxido de etileno de IQOXE de La Canonja (Tarragona) han descrito el "miedo terrorífico" que han vivido durante el suceso, que se ha cobrado un muerto y seis heridos.

Carmen Alcalà, que regenta una tienda de muebles en el barrio de Bonavista, ha calificado de "descomunal" el estrépito. "Hacia las siete menos cuarto ha habido una explosión bastante fuerte. Pero la segunda y la tercera repetición han sido descomunales. Ha sido enorme. La fábrica era una bola de fuego", ha relatado a la agencia ACN.

Después de las explosiones, que han hecho caer parte del falso techo del establecimiento, ha decidido bajar las persianas, cerrar puertas y salir de allí. "Más que nada era el fuego de fuera, Lo teníamos a 400 metros: eran como bombas", ha añadido.

Otra testigo, que se encontraba cerca del lugar, ha explicado que estaba haciendo gimnasia rítmica en el polígono industrial Alba de Vila-seca (Tarragona) cuando ha tenido lugar la deflagración y que cuando ha salido del edificio "el olor del aire era muy, muy raro".

"Estaba haciendo rítmica con las niñas y hemos oído de golpe una explosión muy fuerte. Lo que eran las ventanas, que estaban un poco rotas, han casi volado y las puertas del garaje han tronado mucho", ha dicho Montse Lozano en declaraciones a Europa Press.

Lozano ha indicado que se han esperado dentro del edificio y que los padres de las alumnas han venido a buscarlas, y que cuando han salido muchas de las jóvenes padecían dolor en la garganta y comentaban que "olía muy mal".