Las imágenes que se denuncian son cada vez más habituales. En las calles de Kyoto proliferan las escenas en las que un grupo de personas hace fotografías y graba a las geishas por la calle. Especialmente los turistas, que parecen tener como objetivo a estas mujeres que llaman la atención a quienes visitan el país por primera vez.

Las calles se llenan de escenas surrealistas en las que persiguen a geishas y maiko, las aprendices, que son fotografiadas y grabadas constantemente sin permiso como si fueran una atracción de la propia ciudad.

Ante estas escenas, el Consejo Promocional de la región de Kansai ha publicado tuits en los que llama la atención sobre este asunto en la ciudad de Osaka con motivo de la cumbre del G-20. En estos mensajes, recuerdan que son groseras y que suponen riesgos.

Con diferentes carteles, tratan de lograr paliar este creciente hábito recordando que no está permitido tocar a las geishas y hacerse selfies con ellas.

Se lo han tomado tan en serio, que incluso hay voluntarios en las calles tratando de explicar a los turistas toda esta información.