La Unión Europea espera un repunte de los casos de coronavirus, con un incremento rápido en los próximos días y semanas en el continente europeo, aunque los expertos insisten en que no es momento de entrar en pánico sino responder con racionalidad y coherencia y adoptar decisiones basadas en evidencias científicas y en las recomendaciones epidemiológicas de la Organización Mundial de la Salud y el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC). Es el mensaje que ha salido este viernes del consejo de ministros de sanidad extraordinario celebrado en Bruselas para hacer balance de una situación que empeora día a día.

Según ha explicado la directora del ECDC, Andrea Ammon, a los ministros de sanidad de los 27 son ya 5.544 los casos positivos confirmados en los 26 países del Espacio Económico Europeo más el Reino Unido y 159 el número de personas fallecidas a causa del virus, 148 de ellas en Italia que sigue siendo el principal foco de contagio y de preocupación en la UE. En comparación con la ultima vez que hablamos supone una multiplicación por 100. Esperamos que esta tendencia aumente rápidamente en los próximos días y semanas, ha admitido Ammon que ha recordado también que el nivel de riesgo es de moderado a alto.

El ECDC, que trabaja en cinco posibles escenarios, ha explicado que es esencial que los países intenten controlar la transmisión de la enfermedad en una fase lo más temprana posible y que hay tres áreas que deben priorizar: asegurar una vigilancia epidemiológica adecuada, una buena preparación médica y que el público en general sea consciente de que el brote del covid19 puede tener un impacto importante. La comunicación es un elemento crítico para que todos entendamos mejor la naturaleza del brote y dar una mejor respuesta, ha recordado el director regional para Europa de la OMS, Hans Kluge. A la reunión ha asistido el ministro español de sanidad, Salvador Illa, que también ha abogado por no caer en el "alarmismo" pero tomarse en serio un brote que está "en fase de contención en España" y que "no hay que subestimar", ha indicado durante el debate con sus colegas.

CONTROL DE EQUIPOS DE PROTECCIÓN

Durante la reunión, Bruselas ha hecho balance también sobre un elemento que ha disparado las alarmas: el abastecimiento de equipos de protección médicos y medicinas. Bruselas ha recordado que la semana pasada puso en marcha una licitación pública conjunta en la que participan 20 Estados miembros y que tendrá las primeras ofertas el lunes. Necesitamos asegurarnos de que todo el mundo está bien equipado. Es extremadamente peligrosos si médicos, enfermeras y personal sanitarios no están bien equipados, ha dicho la comisaria de sanidad, Stella Kyriakides.

De momento, no se han detectado carencias pero según el comisario de mercado interior, Thierry Breton, la demanda ha aumentado exponencialmente, en particular de mascarillas de protección, pero también de camisas quirúrgicas, guantes y otros elementos de protección. En cuanto a los medicamentos, tampoco existen indicaciones que apunten a que el suministro se haya visto afectado pero se mantendrán vigilantes lo mismo que en cuanto a las posibles vacunas y tratamientos. Es difícil predecir pero los primeros ensayos clínicos no empezar antes de abril lo que significa que una vacuna tardará todavía unos meses en llegar, ha indicado el director de la agencia europea del medicamento, Guido Rasi.

ESPAÑA, LÍDER DE UN PROYECTO DE INVESTIGACIÓN

La Comisión Europea ha anunciado que multiplica la financiación para investigación al sumar un paquete adicional de 37,5 millones a los 10 millones ya aprobados. En total, 47,5 millones para financiar 17 proyectos que tendrán como objetivo apoyar el desarrollo de nuevas vacunas, pruebas de diagnóstico rápido y nuevos tratamientos. De los 17 nuevos proyectos, uno estará liderado por el Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología (ICN2). Se trata del proyecto CONVAT, junto con Francia e Italia, para la puesta en marcha de una plataforma de diagnóstico rápido y monitorización del coronavirus a nivel global y en el que también participa la Universidad de Barcelona.

Además del ICN2, otros siete centros españoles -la Universidad de Barcelona, el Centro Nacional de Supercomputación, el Instituto de Salud Carlos III, el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra, el Consejo Superior de Investigaciones CIentíficas, el Instituto de Investigación Biomédica y BCN Peptide- participarán en los proyectos financiados por la UE. Todos ellos recibirán 2,4 millones de euros.