La situación en la Unión Europea está bajo control y de momento no hay motivos para adoptar medidas radicales, aunque si el brote de coronavirus sigue propagándose y la situación se agrava los Veintisiete no descartan estudiar medidas adicionales, incluido un eventual cierre de fronteras. La situación ahora mismo no exige este tipo de medidas. Hay que ver la situación de forma positiva y pensar que las medidas adoptadas por los Estados miembros y China serán suficientes para contener el virus, ha zanjado la comisaria de sanidad, Stella Kyriakides, al término del consejo extraordinario celebrado este jueves por los ministros de sanidad de la UE.

El encuentro, convocado la semana pasada por la presidencia croata de la UE, ha servido para evaluar el grado de preparación y coordinación de los Estados miembros. Todos sabemos que los virus no tienen fronteras y por eso era importante esta reunión para mantener la coordinación pero los Estados miembros están preparados y están tomando todas las medidas necesarias para aislar y rastrear casos (de coronavirus), ha resumido Kyriakides.

En una declaración consensuada este jueves, los 27 ministros de sanidad admiten que los brotes de nuevas enfermedades transmisibles, como el Covid 19, constituyen amenazas para la salud pública que pueden llegar a tener alcance mundial, en particular debido a los volúmenes elevados y a la frecuencia de los viajes internacionales en un mundo globalizado. De ahí que han acordado seguir reforzando la coordinación y el intercambio de información y prestar atención a dos ámbitos muy concretos, que en caso de un deterioro de la situación podrían verse afectados en la UE: el abastecimiento de medicamentos y de equipos médicos.

Compras de equipos de protección

Por ejemplo, el 50% de los equipos de protección, según ha explicado Kyriakides, se producen en China, lo mismo que muchas sustancias activas de fármacos, y si la epidemia sigue propagándose podría terminar afectando al mercado europeo. Hay preocupación por la posible penuria de medicamentos pero la agencia europea del medicamento ha examinado la situación y hasta el momento no ha comunicado falta alguna, ha explicado la comisaria que ha anunciado la creación de un grupo de trabajo ad hoc para seguir de cerca la situación. Además, Bruselas también se ha puesto en contacto con la industria europea para estudiar un posible aumento de los suministros de equipos médicos en caso de que fuera necesario y posibles compras conjuntas de equipos de protección.

Al encuentro en Bruselas ha asistido el ministro de sanidad español, Salvador Illa, que ha indicado que España está preparada para hacer frente a cualquier situación y que el encuentro ha servido para enviar una señal clara de que los 27 están coordinados y toman medidas basadas en evidencias científicas y el criterio de expertos. En este sentido, ha criticado la cancelación del Mobile World Congress de Barcelona porque no hay ninguna razón de salud pública que aconseje tomar ninguna medida o que impida la celebración de eventos. Illa también ha recordado que el Gobierno español está tomando todas las medidas recomendadas por los expertos y que mantiene una vigilancia diaria de la evolución del brote.