Los nuevos pasaportes digitales son muy difíciles de falsificar, por lo que alcanzan un valor muy alto en el mercado negro. Por un pasaporte antiguo robado se puede llegar a pagar hasta 3.000 euros (medio millón de pesetas).

El valor de los 1.400 pasaportes robados el sábado en el consulado de España en Sao Paulo es incalculable, según indicaron varios investigadores. "Disponen de un documento que permite la entrada en Estados Unidos. No es necesario falsificarlo. Al ser nuevos, sólo tienen que colocar la foto, el nombre y la firma de la persona que lo compra, y punto", añadieron. También es altísimo el precio de los visados, que permiten la residencia en el espacio Schengen.