Los vecinos del número 17 de la calle Jaime I el Conquistador en pleno centro de Vic (Barcelona), donde residía la víctima, mostraron ayer su desconcierto por la detención del marido y una de las hijas. Una de las vecinas del inmueble recordó que el domingo vio caer una sombra, oyó como si se hubiera caído un tiesto al suelo y después descubrió el cuerpo de la mujer tendido sobre la acera.

La misma vecina del edificio, explicó que la familia de la víctima se había instalado allí hacía unos tres años y que, desde entonces, "la situación en la escalera empeoró muchísimo". El comportamiento de la familia era "muy extraño", dijo, y añadió que eran conocidas las disputas entre sus miembros.