El Consejo Escolar del Estado aprobó ayer por mayoría una propuesta conjunta de varias organizaciones educativas para que la asignatura de Religión quede fuera del currículo escolar y no sea evaluable. El máximo organismo consultivo del Gobierno en materia de educación no universitaria también aprobó una propuesta que pide al Gobierno una ley de financiación de la educación.

"La religión forma parte de las convicciones personales y privadas de las personas. Por tanto, no debe figurar en el currículo", explicó el secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza, STES, Augusto Serrano.

También respaldaron la proposición UGT, CCOO, el Sindicato de Estudiantes (SE) y la Confederación Española de Asociaciones de Padres de Alumnos (CEAPA). Los representantes del Ministerio de Educación se abstuvieron.

Por el contrario, no salió adelante la propuesta que pedía que la Religión fuese evaluable, como pedían la Federación de Religiosos de la Enseñanza (FERE-CECA) y la Confederación de Padres Católicos de Alumnos (CONCAPA), entre otros.

Según Serrano, todas las organizaciones se opusieron a que la reforma de la LOCE esté acompañada por una memoria económica, como ha anunciado el Gobierno, pues desean una ley de financiación y piden, según se aprobó por mayoría, que la inversión en educación se iguale a la media de la UE sobre el PIB.