Los ciudadanos de países excluidos de los acuerdos de Schengen necesitan un visado sellado para una estancia de tres meses. Además deben llevar un mínimo de 300 euros, tener una reserva de hotel o una invitación de algún residente en el país y también han de presentar un billete de vuelta. Si los viajeros no cumplen alguno de estos requisitos, son devueltos.

El Tratado de Schengen prevé que la libre circulación de los ciudadanos de los países que lo han suscrito se pueda suspender en ocasiones especiales y por motivos de seguridad. Desde el pasado 1 de mayo, los 10 países que se integraron en la Unión Europea también forman parte del territorio Schengen. Durante la boda del Príncipe Felipe con Letizia Ortiz se cerraron las fronteras.