Tras 22 años en informativos (21 de ellos presentando), Carme Chaparro (Salamanca, 1973) está ahora al frente de un magacín con el estreno de Cuatro al día (Cuatro, 17.25 horas), un programa de tres horas en directo que coge el testigo de Noticias Cuatro y que combinará temas políticos, investigación, sucesos, deportes, cultura, denuncia social y otras secciones cuyos contenidos se adelantan con una conexión de quince minutos a las 14.15. Acompañada en plató por Santi Burgoa, la periodista conecta con seis reporteros repartidos por España.

-Vaya cambio. Pasa de los informativos a un magacín.

-Sí. Aunque Cuatro va a ser como una especie de banco de pruebas de algo que no se había hecho hasta ahora en España: en vez de ofrecer un informativo tradicional de toda la vida, de media hora, optar por uno mucho más largo, algo parecido a los programas de tarde de la radio, con boletines a las horas en punto, conexiones en directo, tratando la actualidad de manera más extensa y diferente… No es que los informativos de Cuatro hayan desaparecido, sino que siguen ahí pero con otro formato.

-Menuda se montó cuando se dijo que desaparecía Noticias Cuatro.

-Más de la mitad del equipo de Cuatro al día es gente que viene de informativos. Me he traído a mi edición entera. Hoy en día en que todo el mundo ya sabe por redes sociales lo que está pasando y cómo van las cosas, ¿tiene sentido un informativo en todos los canales de Mediaset? ¿Por qué no probamos otra cosa, y ya que queremos reinventar Cuatro, intentamos reinventar las noticias?

-La ola de solidaridad con ustedes fue inmensa cuando se filtró que Noticias Cuatro desaparecía.

-Esa ola de cariño fue maravillosa, y todos la acogimos con mucho agradecimiento. Lo que pasa es que luego hay que salir a contar que no es como se explicó. Sí que es cierto que en Cuatro ha desaparecido el informativo tradicional, aunque yo por ejemplo a las dos de la tarde voy a hacer uno, y luego iremos haciendo más a lo largo del programa. De hecho, en Cuatro al día hay un set específico para informativos. Así que no desaparecen, sino que vamos a hacerlos de otra manera.

-Es una forma de distanciarse de la oferta de la competencia, sobre todo de ‘La Sexta Noticias’.

-Es una apuesta muy clara de Mediaset por Cuatro, por renovar el canal y hacerlo completamente diferente. No tiene nada que ver con lo están haciendo otras cadenas. Nos estamos permitiendo el lujo de estrenar probando cosas y luego ir ajustándolas. Tenemos muchas ganas de ser atrevidos.

-La Sexta ya tiene otro programa de actualidad vespertino, ‘Más vale tarde’. ¿’Cuatro al día’ no tiene nada que ver?

-Para nada.

-¿Por qué?

-No nos miramos en ningún otro canal. Nosotros queremos que cuando la gente llegue a casa ponga la televisión y se sienta acompañada, que a veces podamos sacarte una sonrisa, que te informemos pero que te aportemos también muchas otras cosas que te sean útiles para tu día a día. En ese sentido, es una oferta completamente diferente a lo que hay ahora mismo en otros canales.

-En plató está acompañada por Santi Burgoa, y también cuenta con un equipo de seis reporteros repartidos por España.

-Santi está conmigo en el plató porque, en tres horas de programa, me puedo quedar sin voz (ríe). Y tenemos redactores en seis delegaciones porque muchas veces las televisiones nacionales tendemos al centralismo, y nosotros queremos que la gente de toda España se sienta representada y nos pueda contar sus casos. Esos seis periodistas nos traen cada día un tema, una historia humana o de relevancia que interese a toda España pero que la han buscado ellos desde su delegación en el País Vasco, Valencia, Cataluña, Andalucía, Galicia y Madrid. Además, nuestra idea es poder ampliar el equipo de reporteros.

-¿En el programa hay más peso de temas sociales o políticos?

-Es como el informativo, depende de la actualidad. Contamos las noticias pero de otra manera, y tenemos investigación y temas propios. Por ejemplo, como lo que está haciendo En el punto de mira. También con secciones que le dan otro ritmo al programa, con avances informativos a las horas en punto para que la gente conozca la actualidad muy resumida en un minuto…

-¿Le apetecía este cambio?

-Era muy feliz en las noticias, que son mi pasión, pero esto no deja de ser un informativo de otra manera. Me hizo mucha ilusión cuando me plantearon el programa, sobre todo cuando me presentaron el proyecto de lo que se quería hacer y empecé a conocer a todo el equipo.

-Alguna vez ha comentado que, a pesar de llevar tantos años al frente de las noticias, todavía tiene que demostrar que es tan válida como un hombre.

-Creo que ya cada vez menos, porque llevo 22 años. No solo es cosa mía, porque lo hablo con compañeras de todas las cadenas que están al frente de informativos, y siempre está esa sensación de que, porque das bien en cámara, eres un adorno menos válido que los hombres que han presentado informativos.

-¿Por qué ha tenido esa sensación?

-Cuando empecé a escribir una columna de opinión en la prensa, una señora me paró por la calle y me dijo: «Te he leído y, anda, ¡eres lista!». ¿Entonces usted ya presupone que el hombre que presenta conmigo es listo, pero yo no? En mi caso, con la publicación de las novelas No soy un monstruo y La química del odio, con toda la gente que se las ha leído, con el Premio Primavera, digamos que se ha afianzado un poco más mi credibilidad.

-¿Nunca ha pensado cambiar de casa? Porque le habrán llegado algunas ofertas durante todos estos años en Mediaset...

-Algunas, pero esta es mi casa. Estoy muy feliz así. La verdad es que nunca me he planteado un cambio.