El actor británico ha visitado Madrid para promocionar The Terror, la serie basada en la vendidísima novela homónima de Dan Simmons que acaba de estrenar AMC en España. La serie se sitúa en 1847, cuando un equipo de expedición de la Marina Real, que va en busca del Paso del Noroeste, es atacado por un misterioso depredador.

-¿Le ha venido bien su estancia de niño en un internado para asimilar mejor la disciplina militar de su personaje?

-Sí. Como actor usas tus propias experiencias en todo. Mi personaje entró con 13 años en el Ejército y tuvo que mamar la vida militar. Eso me ayudó a recordar cuando yo tenía siete años y me metieron en un internado. Hay paralelismo entre nosotros. En mi internado eran muy estrictos y se parecían a los militares. Además, estaba rodeado de adultos que daban muchísimo miedo.

-Como esa misteriosa criatura o monstruo que va deteriorando en la serie la situación anímica de la tripulación…

-Creo que los propios personajes nunca acaban de entender lo que es. Los indígenas tampoco se lo van a decir. Lo hablamos entre nosotros y llegamos a la conclusión de que la gente normal acabaría descubriéndolo. Pero ellos trataron mal a los indígenas y se inventan las respuestas. Están en un medio hostil y encima se encuentran con esta criatura misteriosa de otro mundo. Los tripulantes vienen con sus teorías de Newton y sus conocimientos científicos, pero de repente se encuentran con algo que no tiene ningún sentido. Y que además es algo que tiene la inteligencia de un hombre y dedos pulgares como los humanos, Creo que para los escritores esta presencia es una especie de metáfora.

-¿Cómo trata la serie el aspecto colonialista de esta historia?

-La arrogancia de los británicos está presente en esta serie. Pensaban que podían ir a un medio que desconocían completamente y hacerlo suyo. También que podían conseguir la ruta de comunicación entre los dos océanos para controlar el comercio. Cuando llegan allí se dan cuenta de que se han equivocado totalmente.

-¿Cómo reacciona su personaje frente a esta situación límite en que se encuentran los marinos?

-El problema principal de mi personaje es que tiene que superar su complejo de que no ha podido avanzar en su carrera militar. Llega un momento en el que hereda el mando, pero también hereda todas las malas decisiones que tomó el comandante anterior. Tiene que superar todo eso para poder garantizar a sus hombres la seguridad. Se da cuenta de que su situación anterior de no tener aliados y amigos y de repente empieza a desarrollar una unión estrecha y fuerte con todos los hombres. Por eso empieza a entender mejor a Franklin y se da cuenta de que no todo lo que había hecho estaba tan mal. También se da cuenta de que él no había sido un buen segundo y de que Fitzjames actúa como debería actuar un segundo, y no como él.

-¿Qué supone que un director de cine tan prestigioso como Ridley Scott se haya metido a producir series de televisión como esta? ¿Tan mal está ahora el cine?

-Creo que esto está ocurriendo por las oportunidades para contar historias que te da la televisión. Eso es mucho más emocionante porque las ideas y los personajes son más arriesgados en el medio televisivo. En cambio, el cine de alto presupuesto es muy caro y te obliga a hacer algo que sea atractivo para una audiencia mucho más grande. Por eso se ruedan ahora historias que ya nos suenan porque van a lo seguro. Ridley Scott es alguien que quiere contar historias frescas y la televisión le ha brindado la posibilidad de hacerlo. Si ahora intentas hacer algo con unos grandes estudios de cine, seguramente estén pensando cómo reinventar otra vez a Spiderman.

-¿Qué ha sido lo más complicado del rodaje?

-Como la historia es una bajada lenta hacia el infierno, a medida de que avanzaba el rodaje más duro era todo. De hecho, me rompí una costilla y como al final había muchas escenas de acción tuve que rodar en unas condiciones difíciles. Las caras de dolor de mi personaje eran de verdad.