Tras unos años alejado de la pequeña pantalla, el actor estadounidense Zachary Quinto regresa al universo seriéfilo con NOS4A2; Nosferatu, una original propuesta de terror sobrenatural en la que interpreta a un personaje inmortal que se alimenta del alma de los niños. La primera temporada, de 10 episodios, podrá verse a partir de hoy en el canal de suscripción AMC.

-¿Qué tiene esta serie para que haya decidido involucrarse?

-Me gustó mucho la novela de Joe Hill (hijo de Stephen King) en la que se basa. Cuando leí el guion me di cuenta de que podía sacarle mucho partido a un personaje tan complejo. También me gustaba la idea de transformarme físicamente para interpretar las diferentes edades de Charlie Manx.

-¿Cómo define a su personaje?

-Él cree sinceramente que está ayudando a los niños a los que secuestra, algo que procede de su propio trauma infantil, ya que él fue abandonado y maltratado. Se siente identificado con ese tipo de dolor. Así que es una especie de malo-bueno.

-El hecho de la caracterización, ¿cómo afecta a su manera de relacionarse con el personaje?

-El proceso de maquillaje ha sido de gran ayuda. Desde el principio supe que necesitábamos al mejor de los mejores, y tuvimos la suerte de contar con Joel Harlow, que ganó el Oscar en el 2010 por Star Trek, por lo que ya nos conocíamos y me había transformado en Spock. El trabajo con él empezó en la fase de diseño (cómo nos imaginábamos al personaje) y no solo ayudo en la parte física, sino que me sirvió también para crear la gestualidad, el tono de voz. Así que nos fuimos retroalimentando mutuamente.

-Cualquier producción que lleva el nombre de Nosferatu nos puede hacer pensar que estamos ante una serie de vampiros.

-En realidad, no está vinculada a esa mitología. El nombre hace referencia a la matrícula del coche que conduce mi personaje, NOS4A2 y que nos adentra en otro mundo. El juego de palabras es una broma para introducir el concepto del vampirismo psicológico.

-Cuando un actor se acerca a un personaje tan oscuro como este, ¿aprende cosas de sí mismo que no sabía?

-Nunca me ha molestado escarbar en mi lado más oscuro. Es una parte que hay dentro de mí, y no reniego de ella. Todos tenemos partes luminosas y oscuras en nuestro interior.