Hay artistas cuya vida real supera cualquier ficción. Buen ejemplo de ello han sido las producciones televisivas sobre Alaska y Mario y Jorge Sanz. Pero seguramente el actor y humorista con un día a día más fascinante es Quique San Francisco, un peculiar personaje que descubre su extravagante e imprevisible intimidad en Follow San Francisco, un docu-reality que mañana estrena Flooxer, canal por internet de la plataforma Atresplayer.

«Me tachan de drogadicto, juerguista y mujeriego. Y todo es verdad», confesó ayer en Madrid el actor, cuya mayor preocupación durante la presentación de la serie era creerse que su vida, su relación con las redes sociales y, sobre todo, su descubrimiento del mundo de los jóvenes, pueda interesarle a alguien.

Compuesto por 10 capítulos de periodicidad semanal, Follow San Francisco también cuenta con la participación de amigos del artista, como son los actores Antonio Resines y Jorge Sanz, los humoristas Los Morancos, los componentes del grupo musical Hombres G y Pablo Motos, director y presentador del programa de Antena 3 El hormiguero, donde colabora San Francisco.

El docu-reality gira en torno a las peripecias del actor por subirse al carro de las redes sociales, si no quiere terminar representando su show en residencias de ancianos.

Y quien guía a San Francisco a este mundo es Ángela Chica, joven actriz que se convierte en su «comunity manager», el «hada madrina» que le ayudará a «comprender» a youtubers e instagramers, como El cejas o @hamazaza (el primer encuentro del actor con ambos es surrealista).

Así, el programa muestra su día a día (o más bien, la noche a noche) de su reinvención digital y adaptación a las nuevas tendencias. Un nuevo salto al vacío de un personaje con una biografía llena de extravagancias y momentos impredecibles que podrán verse en este show.

VIVIDOR / Enrique San Francisco (Madrid, 1955), uno de los rostros más reconocibles de España, es un vividor que, entre otras cosas, conoció a su padre cuando tenía 17 años, entró en la Legión huyendo de las drogas y ha dormido varias veces en la cárcel (una en Tailandia, por pegarle un puñetazo a un mono). Actualmente vive en un hotel a las afueras de Madrid, se levanta a las seis de la tarde y cada dos días actúa en un garito distinto de España.