15 de cada cien niños de la comunidad aragonesa son obesos o padecen problemas por un exceso importante de peso. Unos datos preocupantes que se tornan más graves al comprobar que esta enfermedad se ha triplicado en los últimos veinte años y ya se ha convertido en una "epidemia" según los expertos.

Pero las cifras se disparan especialmente en algunos tramos de edad, donde Aragón incluso supera a países como Estados Unidos. "Algunos estudios apuntan que entre los 6 y 7 años los índices de obesidad están por encima de los norteamericanos", indicó el doctor Luis Moreno en un simposio celebrado recientemente en Zaragoza.

En este sentido, el presidente del Grupo Europeo de Obesidad Infantil, Kurt Widhalm, hizo un llamamiento para que se planifiquen estrategias de tratamiento y prevención de esta enfermedad a fin de no llegar a la situación de Estados Unidos.

Todos los especialistas que participaron en el encuentro resaltaron los riesgos que conlleva esta enfermedad para los más pequeños, que corren riesgo de padecer patologías como la diabetes tipo dos o el hígado graso, además de problemas psicológicos y del aparato locomotor. "El sedentarismo y las tentaciones de la sociedad de la opulencia son los principales culpables", analizó el doctor Manuel Bueno.

En este sentido, en Aragón ya se han detectado casos de niños con síndrome metabólico, enfermedad nueva asociada al aumento de la tensión arterial alta y dislipidemia --modificación del metabolismo de las grasas-- y a la disminución del colesterol bueno, entre otros factores.

El propio Bueno subrayó otro problema a largo plazo que conlleva la obesidad infantil. "El 75% de los obesos en edad escolar lo serán también de adultos. Es una señal muy significativa", apuntó.

Todos estos argumentos contundentes han llevado a Zaragoza a dar forma a una novedosa iniciativa. Con un presupuesto de cinco millones de euros, la capital aragonesa coordinará un estudio a nivel europeo a partir de enero sobre el estado nutricional de los adolescentes.