Con la vista puesta en la inauguración de la Expo de Zaragoza en junio del 2008, Aragón afronta un año de transición social, política y económica. Esta transición, sin embargo, cuenta con una convocatoria electoral en la que los ciudadanos elegirán (el 27 de mayo) a sus representantes autonómicos y municipales. Los pronósticos no vaticinan sorpresas. Ni la DGA, ni el Ayuntamiento de Zaragoza ni el de Huesca cambiarán, previsiblemente, de inquilinos. Teruel y alguna otra cabecera de comarca destacada podrían, en cambio, tener otra composición política distinta a la actual.

El 2006 ha estado marcado por un vertiginoso crecimiento económico que se consolidará este año. Hasta el 2010, los datos indican que la comunidad autónoma crecerá a mayor ritmo que el resto de España. Con una de las tasas de empleo más bajas de España, y una vez que se ha superado la crisis de GM --con la garantía de que la planta de Figueruelas seguirá produciendo, y además con notable éxito, el Corsa-- la macroeconomía aragonesa va bien. Eso sin olvidar el drama que vivirán las familias de las empresas en proceso de regulación de empleo. Delphi y Primayor son las significativas, aunque la amenaza del cierre de empresas seguirá latente también este año y la subida de precios pondrá más difícil las cosas a las familias.

LA LOGÍSTICA ha sido la idea estrella del equipo de gobierno de la DGA. Las plataformas de Huesca, Zaragoza, Teruel y Fraga se consolidarán en el 2007. El PSOE-PAR que dirige el Gobierno de Aragón acabará su segunda legislatura y en mayo habrá nueva cita con las urnas. El PSOE lo tiene todo a favor para volver a ser el partido más votado y por tanto, formar gobierno. Necesitará aliados. Marcelino Iglesias y sus compañeros prefieren repetir con el PAR. Esta alianza ha sabido imprimir al Ejecutivo un tono suave y pocas fisuras han trascendido. El tándem Iglesias-Biel se ha entendido a la perfección y ha imprimido a la vida política aragonesa un discreto tono político al que le ha acompañado una oposición moderada por su imposibilidad --como han venido denunciando-- de acceder a la información del Ejecutivo. Solo un batacazo inesperado del PAR complicaría las cosas y obligaría a buscar socios no deseados (aunque más cercanos ideológicamente).

En el 2007 los grandes asuntos pendientes y que han sido objeto de confrontación seguirán con plena vigencia. El Congreso aprobará el nuevo Estatuto de Autonomía. Para CHA, un Estatuto recortado y que no dota de suficientes mecanismos de financiación ni alcanza el techo competencial. Para el resto de partidos que han apoyado la reforma (PSOE, PP, PAR e IU), el recorte que con toda seguridad aplicarán las Cortes Generales es una decepción. Iglesias ha salido al paso siempre de los agravios a los que se ha sometido desde el Congreso a Aragón, la DGA ha ido perdiendo peso político en España, percepción que comparten los aragoneses según el último barómetro de opinión.

El próximo 20 de enero se desencallará, con 25 años de retraso, la situación jurídica del Archivo de la Corona, con la constitución del patronato que, a priori y pese al recurrido Estatuto de Cataluña, otorga a las cuatro autonomías implicadas, el mismo derecho junto al Ministerio de Cultura. En cuanto al enquistado asunto de los bienes de la Franja, el enésimo recurso del obispado de Lérida para evitar devolverlos no hace prever ninguna solución.

Seguirán las declaraciones ambiguas que resucitan el trasvase del Ebro --y eso contando que es imposible jurídicamente hacerlo-- que han puesto al PP de Aragón en un brete. Con la ruptura del homogéneo discurso a nivel nacional, los dirigentes populares autonómicos se han separado y han condenado la política hidráulica de su propio partido. Las comunicaciones transfronterizas, los desdoblamientos de la N-II y la N-232, el final de la autovía a Teruel y el refuerzo de las tres instalaciones aeroportuarias de las capitales de provincia serán otros retos.

LAS OBRAS de la Expo avanzan a buen ritmo y la coalición del Ayuntamiento de Zaragoza confía en que todo esté a punto en junio del 2008 para inaugurarla. Belloch cortará la cinta, si se hace caso a las encuestas. La presencia de Biel en su arriesgado doblete animará la campaña. La coalición PSOE-CHA tiene opciones de repetir. Ha superado la agresiva campaña de desprestigio emprendida contra ella, a pesar de que ha tenido crisis que no ha gestionado con habilidad. Aun así, los estudios que manejan confirman que el ciudadano les volverá a dar la confianza.

Zaragoza se revolucionará y asumirá infraestructuras reivindicadas hace años. También el área metropolitana. El próximo año será el año de dar la capitalidad a la ciudad que será el referente nacional del 2008 y regular su entorno, sometido a una acelerada expansión urbanística.