El censo de automóviles de Zaragoza crece cada año y sus propietarios los usan cada vez más. Sin embargo, el mapa que detalla el tráfico en la ciudad muestra los puntos negros del atasco urbano con un tránsito estancado o incluso en descenso desde el 2001. Los conductores buscan vías alternativas para dar de sí la red viaria y el cinturón ha hecho hueco a 40.000 automóviles. 250.000 coches salen a la calle cada día y en las horas punta aguantan colapsos de hasta cinco minutos con el vehículo parado.

Según los datos que maneja el Ayuntamiento de Zaragoza, el parque móvil de la ciudad aumenta a un ritmo de unos 10.000 turismos más por año desde hace un lustro. En el 2004, pagan impuesto de circulación 304.170 vehículos, y a estos hay que sumar unos 60.000 flotantes , que no están registrados en la capital pero que transitan a diario por sus calles.

No hay cifras exactas, pero en este tiempo también ha descendido el porcentaje de turismos que se quedan en casa; hace cinco años, circulaba a diario en torno al 55% del número total de automóviles; ahora, la estimación de los servicios de Tráfico fija hasta en un 70% la cantidad de coches que se ponen en marcha, frente a un 30% que permanece encerrado en el garaje.

Este resurgir del vehículo privado, que trae consigo la complicación del tráfico, ha perjudicado también la demanda y el funcionamiento del transporte urbano. Aunque el ayuntamiento mantiene que el número de usuarios crece, aún aumenta más la cantidad de ciudadanos que elige el vehículo privado. Entre las dos últimas encuestas de movilidad realizadas por el ayuntamiento --años 96 y 2001-- los desplazamientos en autobús urbano aumentaron un 8%, mientras que los que se realizan con coche particular lo hicieron un 14%.

La malla viaria presta aún un servicio aceptable, pero lleva ya varios años rozando los límites de capacidad en determinadas épocas y en las horas punta. Los técnicos mantienen que el tráfico se autorregula porque después de vivir un atasco, o de sufrir la imposibilidad de aparcar en el centro, el usuario opta por dejar unos días el coche en casa.

Zaragoza no es Madrid, pero ya se padecen colapsos circulatorios con retenciones en zonas clave: El Portillo, paseo Pamplona, Puerta del Carmen, plaza Europa, puente de La Almozara y Actur.

Tráfico mide los atascos por ciclos de semafóricos, que duran en torno al minuto y medio. La media de las retenciones en la capital aragonesa en un día malo oscila entre 3 y 5 minutos. No se espera que aumente, por la citada autorregulación del tráfico.

Lo que sí han comprobado políticos y técnicos es que los coches sólo dejan de pasar si se reduce el espacio. De hecho, el único descenso notable de tráfico que se refleja en los mapas de densidad de circulación en Zaragoza es del paseo Independencia y plaza España, en el que la remodelación suprimió cuatro carriles: en el 2001 pasaban por la plaza a diario 51.900 coches, y en el 2003 la cifra había bajado hasta los 30.560.

La sobredosis de tráfico se concentra durante los últimos tres años en los mismos lugares. Lidera el ránking la plaza Paraíso con 106.510 coches; le sigue de cerca El Portillo, con 103.770, y la plaza Europa, con 100.990. En la Margen Izquierda, Valle de Broto con Gómez de Avellaneda y con Carlos Marx se pasan de los 90.000 vehículos por día, y la Puerta del Carmen --84.540--, Sagasta-Las Torres --75.970-- o Gran Vía-Goya --72.770-- se llevan también un buena parte del trasiego circulatorio. Gómez laguna, Vía Hispanidad y Universitas también pasan de los 70.000 coches por jornada.