La realidad del envejecimiento y la despoblación pone de acuerdo a todas las formaciones. Es necesario tomar medidas para evitar que el mundo rural siga perdiendo habitantes. Pero los matices son innumerables y las recetas aplicadas hasta ahora no dan resultados. «Si llego a la presidencia de la DGA convocaré un gran pacto contra la despoblación en el que tengan voz las personas del territorio, nos pondremos a trabajar desde el minuto uno con dotación presupuestaria», garantizó el candidato de Ciudadanos.

Esta afirmación molestó al actual consejero de Vertebración del Territorio. «Aunque lleva poco en política debería saber que eso ya lo hemos hecho gracias a la directriz contra la despoblación, por eso se tendría que dejar de usar este asunto como arma política», explicó Soro.

El PAR recordó que cuando tuvieron responsabilidades de gobierno pusieron en marcha medidas concretas como la red de hospederías o la descentralización de Dinópolis. «Hacen falta recursos y también un cambio de mentalidad», dijo Aliaga.

Muy crítica con la gestión de la DGA fue la popular Mar Vaquero. «Esta legislatura hemos visto que 45 habitantes al día han abandonado el mundo rural por la falta de oportunidades», afirmó al considerar que las medidas tomadas no han tenido la suficiente ambición.

En este sentido Podemos reclamó acciones como la creación de una flota de taxis rurales, la mejora de los ferrocarriles, la apuesta por la banda ancha o la diversificación del turismo. «Hace falta un modelo para vertebrar los pueblos y garantizar las rentas de sus habitantes», insistió a su vez el candidato de IU.

Javier Sada reconoció que hace falta seguir «proponiendo medidas» y citó la reforma de la PAC o las ayudas a la industria como dos mejoras fundamentales para revertir la situación. Temas como los trasvases, la cultura o el arte sacro quedaron fuera del debate por falta de tiempo.