El brote de rubeola que se produjo hace unas semanas en un matadero de Zuera ha confirmado nuevos casos, según informó ayer el boletín epidemiológico de Salud Pública, y las personas afectadas ascienden ya a 12. En todos los casos se han adoptado las medidas oportunas tanto con los pacientes como con sus contactos familiares, mientras que se ha puesto en marcha una estrategia de vacunación con triple vírica a los trabajadores no inmunes del matadero.

En Aragón, hasta este brote colectivo, los últimos casos de rubeola se habían notificado en el 2012, cuando se produjeron afecciones en Alcañiz y Zaragoza que afectaron, sobre todo, a población de origen rumano. La rubeola es una enfermedad vírica transmisible cuyos síntomas principales son fiebre y exantema máculo-papular (erupciones en la piel). Su curso clínico es generalmente benigno y autolimitado, según informó Salud pública, pero la infección por el virus puede tener efectos graves cuando afecta a mujeres embarazadas no vacunadas, en las que puede provocar abortos espontáneos, malformaciones fetales y síndrome de rubeola congénita (SRC) en el recién nacido. En el 2016, la Organización Mundial de la Salud en Europa acreditó la eliminación de rubeola en España, aunque eso no excluyó que aparezcan casos importados de otros países y que puedan provocar casos secundarios aquí. En el 2017 se confirmó un único caso de rubeola en España.