El presidente de CHA, José Luis Soro, califica como «agridulces» los 35 años de vigencia del Estatuto de autonomía. La formación siempre ha sido crítica con el modelo de autogobierno que propone el documento. «Se han perdido bastante oportunidades», reconoció.

El dirigente aragonesista pone como ejemplo su tramitación por la llamada vía lenta. «Ha sido una discriminación y un lastre para muchas de las reivindicaciones autonomías», indica.

En perspectiva reconoce que se ha avanzado en la gestión de competencias, aunque muchas de ellas no tengan asegurada su financiación. Urge una mejora. «En los últimos años hemos visto un retroceso en nuestras capacidades económicas, pues el Gobierno central no duda en intervenir en nuestra capacidad de decisión», lamenta Soro.