Gustavo Alcalde salió ayer reelegido como presidente regional del PP con el 92,12% de los votos de un congreso marcado por la marginación del sector de José Atarés, edil zaragozano y aún secretario provincial. Las primeras decisiones de Alcalde fueron duplicar la estructura del comité ejecutivo para contentar a todos las familias que le han revalidado y rescatar a José Ignacio Senao, para quien ha creado un consejo asesor del que ejercerá como presidente con rango de coordinador adjunto a la presidencia regional.

La elección tuvo lugar en un abarrotado auditorio de la Feria de Muestras, presidida por el secretario general, Angel Acebes.

La nueva dirección no se ha renovado pese a la creación de tres vicepresidencias, ocho secretarías ejecutivas y la duplicación de adjuntos al presidente. De hecho, Gustavo Alcalde ha escogido a sus incondicionales en el grupo parlamentario regional para formar el núcleo duro del partido. Como número dos repite Fernando Martín, quien tendrá como adjunto a Octavio López. El hasta ahora vicesecretario está llamado a gobernar la vida diaria del PP de Aragón.

Los también diputados regionales Eloy Suárez y Miguel Angel Lafuente ascienden a adjuntos al presidente, puesto que mantiene Antonio Suárez, portavoz en las Cortes.

En el organigrama tienen espacio propio los secretarios provinciales, que también ejercerán ahora como vicepresidentes del partido. En este cargo ya figura Domingo Buesa, que no saldrá elegido al frente de la dirección de Zaragoza hasta dentro de unas semanas.

Como vicesecretarios regionales revalidan Luis María Beamonte y Roberto Bermúdez de Castro y se estrenan Ricardo Canals y Yolanda Vallés.

La eurodiputada Luisa Fernanda Rudi también sigue presente en el dirección y repite como presidenta del comité electoral. El oscense Alfonso de Meer, que retiró una lista alternativa, estará al frente del comité de derechos y garantías.

Pese a la absoluta ausencia de hombres de Atarés --se caen su hermano Vicente y el edil Ricardo Mur del comité de dirección popular-- y de nuevos nombres , Luisa Fernanda Rudi prefirió hablar ante el Congreso de unidad y renovación. "La brecha está desaparecida", dijo la eurodiputada, quien se mostró convencida de ganar elecciones gracias al "equipo renovado" de Alcalde.

INICIATIVA El nuevo presidente salió elegido con un menor porcentaje de votos que hace dos años --un 92,12% frente al 94,28% de septiembre del 2002--, un dato que no le impidió emocionarse ante el auditorio congregado en la Feria.

Triunfal, en mangas de camisa, llamó a la movilización, "a salir a la calle", para reconquistar las principales instituciones de Aragón. "Quiero empezar una nueva etapa en el PP para salir decididos y convencidos de que va a gobernar en Aragón", apuntó.

Sin ningún tipo de autocrítica y sin mención al trasvase, el nuevo líder conservador de Aragón tan sólo aludió al pasado para decir que han sido años "muy difíciles" para el PP. A su juicio, la situación llevó al partido a una posición defensiva, "de casi resistencia", de la que está decidido a salir. Y añadió: "Me he presentado para ganar y no para estar en las trincheras viendo cómo caen los obuses. El PP va a liderar el debate. Vamos a salir a la calle, a luchar sin complejos para dar la vuelta a esto".

Alcalde aprovechó su intervención para atacar a los gobiernos regional y central. Al de Aragón le acusó de carecer de "convicciones" y de ocultar su gestión "inconsistente" en "cortinas de agua" --en alusión a la oposición al trasvase-- para centrar ahora su proyecto político "en las cabezas del escudo de Aragón".

El nuevo líder del PP aragonés fue piropeado por su nuevo aliado y presidente del Congreso, José Ignacio Senao. Abrió las intervenciones de la reelección calificando al nuevo presidente de "hombre bueno, capacitado, de palabra y honesto". A su juicio, el partido sí logrará ahora los "mayores éxitos".

Sus declaraciones no fueron compartidas por el sector Atarés, que fuera de micrófonos se refería a la nueva ejecutiva como "la AP de los años 80". Oficialmente, el edil zaragozano se mostraba cauto, aunque no renunció a lanzar un aviso. "Ahora, Alcalde es más que nunca el responsable de lo que le ocurra al partido", sentenció.

El exalcalde tampoco quiso enjuiciar la marginación sufrida en el organigrama, en la que sólo figura José Luis Calvo: "No lo voy a valorar. Lo deben hacer los ciudadanos" .