Chunta Aragonesista apuesta claramente por la intermodalidad y por el tranvía para capacidades medias. Además, impulsa un programa denominado Aratren que consiste en la unión de sistemas diversos de transporte con el fin de interconectar la ciudad y su entorno con trenes, autobuses y tranvía. En este sentido, apuesta por una segunda línea este-oeste, lo que le diferencia de otras formaciones políticas de la ciudad.

En el marco del Plan de Movilidad Urbana Sostenible, CHA quiere poner en marcha las supermanzanas, con el objetivo de unificar la planificación del espacio público más eficiente y sostenible. Así, propone diseñar redes diferenciadas para cada modo de transporte, identificando las vías principales de la ciudad, de mayor capacidad, y las secundarias, para las que se compromete a avanzar en su pacificación. De esta forma, espera conseguir mayor espacio accesible para el peatón en las zonas residenciales, a medida que se reduce, asimismo, el uso del vehículo privado.

Otro punto crucial consiste en la apertura de un amplio proceso participativo que termine con la redefinición de las líneas actuales de autobús urbano. Se trata de crear una red en malla y nodos de comunicación con otros medios de transporte.

Asimismo, los nacionalistas se inclinan por potenciar los bonos semestrales y anuales del transporte público, mediante distintas medidas como su abaratamiento, para incentivar el uso de transportes urbanos, reclamando al Gobierno de Aragón que estos abonos puedan deducirse del tramo aragonés del IRPF, con el objetivo de favorecer el uso del transporte público.

Finalmente, entre otras medidas, CHA apuesta por regular el tráfico de mercancías, optimizando todas las zonas de carga y descarga, estudiando la limitación de horarios en zonas conflictivas.