Exijo la inmediata retirada del trasvase", reclamó anoche el presidente aragonés, Marcelino Iglesias, en Tauste, tras conocer los informes de la Unión Europea contrarios con el trasvase del Ebro. Mientras tanto, el presidente catalán, Pasqual Maragall, advirtió que el dictamen comunitario "marca un antes y un después" respecto al Plan Hidrológico Nacional (PHN).

El Gobierno de Aragón y las fuerzas políticas aragonesas, excepto el PP, calificaron de "demoledor" y "rotundo" el informe adelantado ayer por este diario. En Teruel, antes de participar en la consagración del nuevo obispo de la diócesis, el presidente aragonés señaló que la "buena noticia" supone un "traspiés definitivo" para el trasvase del Ebro. "Ahora es el momento de estudiar proyectos alternativos, más rápidos, ecológicos y económicos para dar satisfacción a los usuarios del agua del Levante", concluyó Iglesias.

FRACASO DEL PP En Huesca, la secretaria federal de Medio Ambiente del PSOE, Cristina Narbona, aseguró que el documento es "demoledor" y constituye un "fracaso" del Gobierno del PP. También el candidato número dos de CHA al Congreso, Bizén Fuster, valoró "muy positivamente" el informe que, recalcó, recoge "a la perfección las tesis que hemos mantenido siempre y que cuentan con más de 32.000 firmas de apoyo". Y remarcó: "Si no hay aportación europea será muy difícil llevar a cabo la obra, independientemente de la voluntad del PP". El candidato del PAR al Congreso por Zaragoza, Manuel Blasco, advirtió que sería "una barbaridad" que el Gobierno del PP decidiera seguir adelante con el trasvase sin la ayuda financiera de la UE. "Un Estado no puede enfrentarse a la Unión Europea, aunque el señor Aznar parece especialista en enfrentarse con todo lo que nos rodea". El coordinador general de IU, Adolfo Barrena, calificó de "varapalo para el Partido Popular" el informe medioambiental.

Sin embargo, la eurodiputada popular María Antonia Avilés se preguntó de "dónde ha salido" el informe y recalcó que "no cambia nada" en la postura oficial de la UE.

En Cataluña, el presidente Pasqual Maragall insistió en que el PHN es un proyecto "anticuado", tal vez lógico "hace cien años", pero fuera de época ahora porque "hay otras tecnologías y otras necesidades, una nueva cultura del agua".

GREENPEACE Y ADENA La euforia desatada ayer, por otra parte, fue compartida también por la Plataforma de Defensa del Ebro y Greenpeace, que exigieron la inmediata retirada del proyecto; Adena, que considera confirmadas todas las críticas que formuló al plan, y Ecologistas en Acción, que insistió en destacar que el PP "sobreestimó los beneficios del trasvase".