Aaragón no es una comunidad eminentemente turística, pero el peso de este sector en la economía regional no para de escalar posiciones. El crecimiento sostenido que viene experimentando esta actividad tuvo su colofón el pasado agosto, que fue el mejor mes de la serie histórica gracias principalmente al tirón que tiene Zaragoza. La ocupación hotelera llegó a las 761.897 pernoctaciones, un 2,7% más que el mismo periodo del 2017 (741.543) y el mejor registro hasta la fecha al superar el que se alcanzó en agosto del 2008 (743.16), en plena Expo de Zaragoza, según los datos dados a conocer ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El número de viajeros también fue récord: 365.136 turistas contabilizados, un 2,65% más que hace un año.

Los buenos resultados de agosto no son aislados. La evolución positiva se viene marcando desde el comienzo del año. La ocupación hotelera en Aragón en el acumulado de los ocho primeros meses del 2018 es 3.957.236 pernoctaciones, un 2,23% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior. Y el número de viajeros ha superado el listón simbólico de los dos millones de turistas (2.008.482) en lo que va de año tras repuntar un 1,74% en la comparativa interanual.

Las tres provincias no han tenido sin embargo un comportamiento homogéneo. Zaragoza ha despuntado sobre el resto con un fuerte crecimiento del 8,3%, hasta 1.880.529 estancias (288.778 solo en el mes de agosto, un 8,2% más). En Huesca y Teruel, en cambio, la ocupación en los establecimientos hoteleros retrocedió un 3,3% y un 1,2%, respectivamente, hasta 1.541.867 y 534.842 pernoctaciones cada una de estas provincias. Los datos de agosto también fueron a la baja en el Altoaragón (359.135, un 2% menos), pero sí fueron mejores en las comarcas turolenses (113.985, un 5,3% más).

La celebración del Centenario del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido no parece haber sido suficiente acicate para la provincia oscense, que registra igualmente una caída en el número de turistas. En lo que va de año ha recibido 637.749 viajeros, lo que supone un descenso del 3,8% (en agosto un 1,5% menos, hasta 138.064). Esta variable sí ha sido positiva en la provincia turolense, con un incremento del 2,9% hasta los 302.644 turistas (60.929 en agosto, un 8,1% más). En cuanto a los precios hoteleros, Aragón fue una de las comunidades donde más subieron en agosto, con una alza del 4,1%, mientras que el grado de ocupación se situó en el 57,9%.

mercado laboral / Las buenas cifras del turismo aragonés han hecho que también el empleo del sector haya anotado su máximo este verano. El promedio de ocupados en hostelería y agencias de viajes durante los meses de junio, julio y agosto se situó en 39.966 trabajadores en la comunidad aragonesa, lo que supone un aumento del 2,7% respecto al año anterior y del 9,3% más en relación a hace una década. Con todo, el incremento es algo inferior al del conjunto de España, donde el número de afiliados subió un 3,1%, hasta 1.799.292.

Tras superar los 36.000 ocupados en el 2008 con el efecto de la Expo, el número de empleados en el sector turístico aragonés registró -a excepción de un leve repunte en el 2010- cinco años de descensos consecutivos hasta anotar la segunda cifra más baja en el 2013 (34.919). Desde ese punto, este colectivo de ocupados aumentó durante los siguientes cinco ejercicios, alcanzando la cifra más alta en este 2018. Incluso ha habido ya dos meses en los que la comunidad ha superado por primera vez en su historia la barrera de los 40.000 trabajadores (40.296 en marzo y 40.222 en julio). Esta pujanza está empezado a provocar problemas de falta de mano de obra, sobre todo en las zonas rurales, según fuentes empresariales.