El consejero de Agricultura y Alimentación, Gonzalo Arguilé, anunció ayer que el Gobierno aragonés no es partidario de declarar zona catastrófica en las comarcas afectadas por las últimas tormentas. Arguilé, que recorrió ayer las Cinco Villas y otras áreas siniestradas, se mostró en su lugar favorable a "actuar con diligencia, con rapidez y con eficacia", además de poner a disposición de los perjudicados todos los medios de la Administración para atender estas situaciones.

El consejero subrayó, no obstante, que los Gobiernos autonómico y central atenderán presupuestariamente las pérdidas en bienes, cultivos e infraestructuras en las zonas afectadas por las lluvias y riadas, según informa Efe .

El consejero explicó que propondrá al Gobierno de Aragón que las zonas que sufrieron afecciones "importantes" reciban el mismo tratamiento que por las riadas de años anteriores, es decir, que la comunidad autónoma asuma las pérdidas de cultivos y bienes que no están amparados por seguros agrarios.

Además, indicó que la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, recorrerá mañana la zona de Bardenas en una visita que estaba prevista antes de las riadas.

Dijo que no le cabe duda de que "el Ministerio de Agricultura y el Gobierno de Aragón estarán a la altura de las circunstancias y sin ninguna reticencia como en el pasado la hubo por parte del anterior Gobierno con las riadas del Ebro".

Por su parte, el presidente de la Comunidad de Regantes de Bardenas , Luis Ciudad, aseguró ayer que hoy se trazará un "balance real" de los daños que las tormentas de lluvia y granizo causaron en el sistema de riegos, pero anunció que "lamentablemente, parece que van a ser numerosos".

Ciudad explicó que cuando esté confeccionado el balance global se trasladará a los técnicos de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).