La implantación del conocido como aterrizaje verde, sistema de aterrizaje de los aviones con los motores a menores revoluciones con el fin de reducir el ruido y la contaminación, sigue aparcada a la espera de "próximas sesiones" de la Comisión Interministerial de Defensa y Fomento (CIDEFO), según aseguró ayer en Zaragoza Ángel Luis Arias, director general de Aviación Civil.

La demora en la llegada de este procedimiento, que aliviaría la contaminación acústica de los barrios afectados por el tránsito de las aeronaves (Valdespartera, Garrapinillos, Rosales del Canal, Casablanca, Oliver, Valdefierro, Montecanal y Arcosur) viene motivada por el doble uso civil y militar del aeropuerto de Zaragoza.