El Ayuntamiento de Zaragoza está haciendo frente a sus facturas 127 días después de su emisión. Este es el dato más negativo que deja el primer trimestre del año en el seguimiento del plan de ajuste municipal. Así lo reconoció el propio responsable de Economía y Hacienda, el vicealcalde Fernando Gimeno, aunque no dejó claro si es mejor o peor que los 47 días a los que, hace solo tres meses, aseguraba que estaba pagando a sus proveedores. Porque son fórmulas distintas.

En su día, con la petición realizada al Gobierno central para que se evitara la retirada de la dedicación exclusiva a nueve concejales del consistorio, se aseguraba que ese era el tiempo que tardaba un proveedor en cobrar. Porque, contra lo que se venía calculando hasta entonces, se había tenido en cuenta la fecha en la que se reconocía la deuda y no la de emisión de la factura. Y ayer, cuando se podía comparar si la situación había mejorado o empeorado, resulta que se había hecho el cálculo de nuevo con la fórmula anterior. Porque esos 127 días supondría casi triplicar esos 47 que se aseguró a Hacienda en febrero. Y con los votos de todos los partidos en el consistorio. Tampoco fue posible cuántos días serían esos 47 en febrero, cuando se recalculó.

Sin embargo, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, al parecer, pronto pondrá fin a esta duda, ya que está previsto aprobar un decreto "que dirá cómo se calcula" el plazo de pago a proveedores. Porque hasta ahora suponía "un caos" al no haber "un criterio homogéneo".

Aún así, Gimeno ayer no se mostró ya tan optimista con la idea de que Zaragoza pueda ser considerada una excepción a la hora de aplicar la retirada de la dedicación exclusiva a nueve de sus 31 concejales. "Tengo alguna duda de que Hacienda vaya a decirnos que sí", apuntó el vicealcalde.

Por otro lado, el vicealcalde tiró de las deudas de otras administraciones para justificar el retraso en el pago a sus proveedores. "Si pagaran los más de 50 millones de euros que nos deben, el problema se arreglaría".