El vicepresidente aragonés y presidente del PAR, José Angel Biel, insistió ayer en que sería "una irresponsabilidad" ubicar el campo de fútbol a escasos metros "del hospital de referencia" de Aragón "y no estudiarlo". Biel criticó un proyecto cuyo partido, en la oposición en el Ayuntamiento de Zaragoza, rechaza.

Los partidos se refirieron a la decisión del Consejo de Ordenación del Territorio de Aragón (COTA) de devolver al consistorio el expediente de modificación del Plan General de Ordenación Urbana de la Romareda. Biel, que aseguró no haber leído esa resolución, recordó que existen otros dos informes --de Protección Civil y del Departamento de Salud-- "que hay que tener en cuenta". A su juicio, urbanismo "no está reñido con Protección Civil ni con Medio Ambiente". Adelantó que la DGA aprobará pronto dos leyes, Urbanismo y Ordenación Territorial. "En ellas se verá nuestra posición".

Los grupos del PP y el PAR consideraron que esta decisión confirma la inviabilidad de este proyecto. IU se sumó a las críticas y pidió también la retirada de la operación.

El portavoz del PP en el ayuntamiento, Javier Muñoz, consideró "significativo" que la DGA plantee "pegas en cuanto a la justificación de la financiación del proyecto, a los accesos al propio campo y centro hospitalario o al tráfico en la zona".

Aseguró que el proyecto de PSOE y CHA "es la peor opción para una ciudad moderna como Zaragoza, y más ahora que se va a convertir en un escaparate nacional e internacional con la Expo 2008", y abogó por construir el nuevo campo de fútbol en otra zona de la ciudad, a fin de que Zaragoza no se quede con "un estadio de segunda categoría".

Por su parte, el PAR reclamó la paralización "urgente" de la Operación Romareda ante las "serias dudas" expuestas por el COTA. Su portavoz, Manuel Blasco, afirmó que la designación de Zaragoza como sede de la Expo 2008 debería "hacer reflexionar" al alcalde y su equipo de Gobierno, ya que "el proyecto está muy debajo de la categoría que merece una ciudad que va a organizar una exposición internacional".

Para IU, que alegó en contra del proyecto, "tienen la máxima importancia cuestiones como el peligro de colapso circulatorio, las afecciones a la movilidad urbana y a la ciudad sanitaria Miguel Servet". Las consideraciones del COTA, unidas a los informes desfavorables de Protección Civil y del Departamento de Salud y Consumo, son, según la coalición, razones suficientes para que se descarte definitivamente el proyecto.

El movimiento ecologista también ha criticado la fórmula para financiar el estadio y se opone a la construcción del centro comercial. Sus representantes en el COTA votaron a favor de la devolución del expediente, pero siguieron defendiendo la opción de que el estadio se remodele en el lugar que ocupa.