Josep Lluís Carod-Rovira mantuvo ayer su agenda electoral y por la tarde, tras la reunión de la dirección de su partido para evaluar la crisis, dio un mitin en Tarrasa (Barcelona), donde fue aclamado por más de un millar de seguidores. El líder y candidato de ERC afirmó entre salvas de aplausos enfervorecidos que el PP "tiene más interés en obtener votos que en conseguir la paz", y acusó al PP de hacer un "uso barriobajero de la política antiterrorista".

El dirigente republicano calificó el comunicado de ETA en el que declara suspendidos los atentados en Cataluña como "una ingerencia intolerable en la política cotidiana catalana".

Admitió que el de ayer fue "un día duro", pero insistió en que la tregua de ETA debe ser extensible a todos los territorios, recordando que "ni es política la violencia de ETA ni tampoco criminalizar a los que piensan diferente" porque "no gusta al PP".

Aseguró que los republicanos viven bajo "una vergonzosa actitud de linchamiento" y esperaban "un discurso valiente de las fuerzas de izquierda", pero acusó al PSOE de estar asustado bajo "el chantaje de las víctimas" que impulsa el PP.

ERC defenderá su ambición de la independencia de Cataluña "a la catalana, pacíficamente y hablando", dijo Carod. Y recordó a ETA que "con la violencia" no ha logrado ninguno de sus objetivos en 50 años.